Tijuana.— Alrededor de 80 migrantes centroamericanos de la comunidad Lésbico, gay, bisexual, transexual, transgénero, travesti e intersexual (LGBTTTI) arribaron ayer a esta ciudad, pero con su llegada nacieron dos frentes aquí: uno de quienes buscan apoyar con trabajo humanitario, y otro de racistas que fomentan un discurso de odio e intolerancia.
Se trata de hombres, mujeres y un par de niños que viajaron desde hace semanas desde Honduras, El Salvador y Guatemala con la intención de llegar a Estados Unidos para pedir asilo al gobierno de ese país.
Cruzaron parte de México en grupo y se trasladaron en autobuses hasta Tijuana, donde fueron recibidos en la central camionera por personal del Instituto Nacional de Migración (INM) que los llevó a una casa situada en la zona costa del municipio, donde se quedarán hasta ser recibidos por las autoridades migratorias de la Unión Americana.Al llegar, y mientras hablaban con la prensa, vecinos de la Sección Coronado como Virginia Lombroso de Sotelo, Patricia Elena Juárez Hernández y José Roberto Martínez externaron su rechazo, con el argumento de que con su presencia aumentarán los más de 2 mil asesinatos que ya ocurrieron previo a la llegada de migrantes, y que mantienen a Tijuana uno de los tres primeros lugares del país con más homicidios.
Aunque los vecinos aclararon que no se trataba de discriminación, indicaron que estaban en desacuerdo con que mantuvieran la bandera del orgullo gay, identificada con un arcoíris. También señalaron que no se trata de que el fraccionamiento sea para residentes con alto poder adquisitivo, pero cuestionaron la “facha” en que llegaron.
Sin embargo, mientras que activistas y grupos de apoyo se organizaron previo a su arribo para ayudar con donativos que van desde ropa, comida y medicamentos, también se creó en redes sociales un grupo de tinte racista que no sólo rechaza la llegada de extranjeros, sino que fomenta un discurso de odio y violencia.
Con el nombre de “Tijuana en contra de la caravana migrante” y a menos de 24 horas desde su creación, este grupo en Facebook cuenta con menos de 300 integrantes, quienes entre otros comentarios escriben frases y comparten imágenes en las que hay artículos deportivos que insinúan que serán utilizados para golpear a migrantes, como lo escribió el usuario identificado como “Pancho Spartans”.
Otros, como “JN Martínez”, hicieron un llamado a los inconformes para unirse y trasladarse a la casa donde duermen hombres, mujeres y niños, para demostrarles su rechazo. Algunos de los perfiles son de residentes de Tijuana que trabajan en Estados Unidos o de migrantes que llegaron de otros estados del país y que ahora viven en la frontera.
Al respecto, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) solicitó al gobierno del estado y a los ayuntamientos de Mexicali, Tecate y Tijuana, medidas cautelares para garantizar la seguridad de los centroamericanos, además de apoyarlos en las necesidades básicas como alimentos y un lugar para dormir.