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Tuxtla Gutiérrez.— Migrantes africanos vandalizaron instalaciones que fueron colocadas para que la feria regional de seguridad se llevara a cabo ayer en el parque Miguel Hidalgo de Tapachula.
Los extranjeros derribaron vallas, sillas, carpas y un templete que se encontraba en el área donde se esperaba la inauguración de la actividad. La acción de los inconformes propició un conato de enfrentamiento con los policías que resguardaban el sitio.
Los africanos marcharon una vez más hacia el centro de esa ciudad fronteriza en demanda de tránsito libre por México.
La protesta salió de la Estación Migratoria Siglo XXI, en cuyo exterior están plantados desde hace más de 40 días.
Cuando llegó al parque, la marcha encontró rodeado el inmueble del ayuntamiento con las instalaciones para la feria. Avanzó a la explanada, derribó el cerco y accedió a unos metros de la sede de la alcaldía, vigilada por policías.
El conato de enfrentamiento se produjo cuando un africano amenazó con arrojar una valla metálica a los agentes y uno de ellos respondió con gases lacrimógenos.
La situación se normalizó después de varios minutos de gritos y jaloneos, una vez que los manifestantes africanos se replegaron al parque Bicentenario, donde se reunieron con migrantes cubanos y centroamericanos.
En su reciente visita a la región, el activista español José Palazón Osma alertó que Tapachula está convirtiéndose en una “ciudad cárcel” para la migración, por las medidas de contención aplicadas para evitar que los extranjeros continúen su ruta a Estados Unidos.
El presidente de la Asociación Pro Derechos de la Infancia dijo ayer que la situación que enfrentan los migrantes en Chiapas es semejante a la de Melilla, España, donde se frena a los migrantes africanos que llegan a Europa.