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Habitantes de las rancherías y pueblos de los municipios de Coalcomán y Tepalcatepec, Michoacán, lanzaron un llamado de ayuda a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y organismos internacionales defensores de los Derechos Humanos.
Lo anterior, tras más de un mes de haber quedado en medio de los enfrentamientos entre grupos de civiles armados en esa zona de la Tierra Caliente.
En la carta, los habitantes de ambos municipios señalaron que decidieron levantar la voz ante la violencia que los rodea y pidieron a los organismos internaciones: “En la medida de sus posibilidades intercedan por nosotros para que el gobierno de México haga algo por frenar el escenario de sangre en el que nos encontramos envueltos”.
Indicaron que miles de familias han tenido que abandonar sus hogares y su patrimonio ante las amenazas, ataques y asedio de los grupos delictivos.
“Nos han robado a los habitantes la tranquilidad, nuestro ganado, nuestros cultivos, nuestras casas, el alimento, y en algunos casos la vida”, se lee en el texto.
“Nosotros no somos criminales. Somos seres humanos que en este momento nuestro único alimento y el pan de cada día, son las balas asesinas que también roban el sueño a nuestros hijos”, expresaron.
Insistieron que cada vez hay menos comida en esos municipios, menos comercios abiertos y consideraron que están ante un estado de guerra.
“Por eso es que rogamos, a nombre de los habitantes de los municipios atacados, la intervención pronta de los organismos internacionales, así como, una vez más, del Estado mexicano para que frenen la violencia antes de que sea muy tarde”, pidieron pobladores de Coalcomán y Tepalcatepec.
