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El gobierno mexicano invitó ayer al Buró Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI, por sus siglas en inglés) a “acompañar la investigación sobre el suceso en el que fueron víctimas ciudadanos de nacionalidad estadounidense en el municipio de Bavispe, Sonora”, donde fueron asesinados nueve miembros de la comunidad LeBarón.
A través de una nota diplomática dirigida a la embajada de Estados Unidos en México, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), “en estrecha colaboración con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), y en apego a los protocolos conducentes de la Fiscalía General de la República (FGR), hizo oficial el ofrecimiento” al FBI, se informó a través de un comunicado.
En el documento se precisa que “en el amplio marco jurídico de cooperación bilateral entre ambos Estados se contempla la colaboración en procuración de justicia y el realizar ciertas actividades de apoyo técnico binacional”.
Se establece que “los agentes que participen únicamente podrán hacer diligencias en conjunto con las que realicen las autoridades de la Fiscalía General de la República, y no estarán armados”.
El documento, difundido por la Secretaría de Relaciones Exteriores, señala que la cooperación entre el gobierno mexicano y el buró “es amplia y se da de forma descentralizada entre las diversas instituciones federales mexicanas encargadas de la procuración de justicia”, al tiempo que agrega que el FBI ha colaborado en diversos casos con las autoridades mexicanas.
El gobierno de México reiteró su compromiso de investigar los hechos para “deslindar responsabilidades y ofrecer justicia a las familias afectadas”.
El 4 de noviembre un grupo armado atacó varios vehículos en los que viajaban mujeres y niños de la familia LeBarón; la agresión, en la que murieron tres mujeres y seis niños, ocurrió en el rancho La Mora, en los límites entre Sonora y Chihuahua.
En el ataque también resultaron heridos cinco menores y otros tres resultaron ilesos.
Tras los asesinatos, el presidente de la Unión Americana, Donald Trump, dijo que es momento de “declarar la guerra a los cárteles” y que si México así lo desea, con “ayuda de Estados Unidos” puede borrarlos “de la faz de la Tierra. ¡Simplemente esperamos una llamada de su nuevo gran presidente!”.
Añadió que “si México necesita o solicita ayuda para limpiar estos monstruos, Estados Unidos está listo, dispuesto y es capaz de involucrarse y hacer el trabajo de manera rápida y eficaz”.
Al respecto, el Presidente mexicano rechazó la ayuda directa de Estados Unidos para “librar una guerra” contra el narcotráfico.
“Envié mi más profundo pésame a los familiares y amigos de quienes fueron asesinados en los límites de Chihuahua y Sonora. Le agradecí su disposición de apoyarnos y le informé que las instituciones del gobierno de México actúan para hacer justicia”, dijo el Mandatario mexicano en su cuenta de Twitter.
El jueves pasado, el activista Julián LeBarón se dijo dispuesto a acudir a las autoridades estadounidenses para esclarecer quiénes fueron los responsables y sus motivos, y expresó su desconfianza ante las investigaciones en México.
“No creo que las autoridades [mexicanas] puedan hacer justicia, las instituciones están corrompidas hasta la médula”, afirmó.El viernes, la gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich, pidió a la Fiscalía General de Justicia del estado tramitar la colaboración y el respaldo del FBI en las investigaciones de este caso.