La Fiscalía General de Nayarit investiga el homicidio de Margarito Díaz González, marakame (sacerdote) y líder wixárika involucrado en la defensa de los sitios sagrados del pueblo huichol.
Díaz González fue asesinado la noche del sábado 8 de septiembre en su casa, en la localidad de Aguamilpa, en el municipio El Nayar.
Por este hecho, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) solicitó al gobierno del estado medidas cautelares para la protección de la familia de la víctima y exigió el pronto esclarecimiento.
El fiscal de Nayarit, Petronilo Díaz Ponce, explicó que entre las 22:30 y 23:00 horas el marakame dormía tapado con una sábana bajo un tejabán en su casa, cuando un sujeto que no pertenece a la comunidad indígena se le acercó para preguntarle dónde era el baile que en ese momento se realizaba en el pueblo. Cuando Díaz González se descubrió el rostro para responderle, el sujeto le disparó con una pistola .9 milímetros.
El fiscal explicó que se ha brindado protección a la familia del líder wixárika y se abordan varias líneas de investigación, entre ellas las labores de defensa de los centros sagrados del pueblo wixaritari, sobre todo en San Blas, Nayarit; Chapala, Jalisco, y Wirikuta, en San Luis Potosí, por lo que se han girado oficios para solicitar el apoyo de las autoridades en estas últimas dos entidades.
Larga trayectoria. Margarito Díaz González fungía como presidente del Consejo de Vigilancia de la Unión de Centros Ceremoniales de Jalisco, Durango y Nayarit, organización que ha tenido varios logros en la defensa de los sitios sagrados de los wixaritari.
Samuel Salvador, asesor jurídico de la Unión de Centros Ceremoniales, explicó que en los últimos años se han tenido importantes logros, como el reconocimiento de la propiedad de una parte de la Isla del Rey, en San Blas, Nayarit, donde los wixaritari tienen el centro ceremonial llamado Tatei Aramara.
Recordó que recientemente se tuvo un conflicto con las autoridades municipales, pues se quemó intencionalmente el techo del centro ceremonial y, hubo quien responsabilizó a personal municipal.
Salvador señaló que Margarito Díaz González ya había sido tesorero de la Unión de Centros Ceremoniales y por su buen desempeño se le designó presidente del Consejo de Vigilancia, por lo que estaba en la primera línea de las acciones de defensa de los sitios sagrados.
Indicó que también en Wirikuta, en el desierto de San Luis Potosí, se ha realizado una defensa férrea del territorio, sobre todo contra empresas mineras que tienen concesiones justo donde según la cosmogonía wixárika se originó el Universo.