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Cuernavaca.— Morelos vivió ayer una jornada de extrema violencia con cuerpos tirados en parajes y ataques a balazos en viviendas. Las acciones arrojaron un saldo de 10 muertos en distintos puntos del estado. Los homicidios son atribuidos al crimen organizado, cuyos líderes, dijo el comisionado de Seguridad Pública, José Antonio Ortiz Guarneros, disputan el control del mercado de las drogas.

“No podemos negar que existen homicidios dolosos que son los que llaman la atención, pero 90% son resultado de los enfrentamientos entre bandas”, afirmó el comisionado tras el levantamiento de seis cadáveres de hombres, ultimados la madrugada de ayer en un negocio de lavado de autos en Cuernavaca.

Entre las víctimas se encuentra un menor de 17 años con archivo en el Centro de Ejecución de Medidas Privativas de la Libertad para Adolescentes.

Reportes policiales indican que el asesinato de los hombres fue perpetrado por un grupo armado que ingresó con violencia al edificio del autolavado, situado a un costado de la autopista México-Cuernavaca, y disparó a mansalva sus armas de diferentes calibres.

En ese negocio de la colonia Antonio Barona murieron cinco personas y una más falleció cuando recibía atención médica en el Instituto Mexicano del Seguro Social, informaron las autoridades. Más tarde se conoció que en el negocio estaban una mujer y un niño, quienes lograron salvar sus vidas porque se refugiaron en el baño.

En el lugar de los hechos peritos en la materia fijaron y embalaron diversos casquillos percutidos de distintos calibres.

Horas más tarde, el gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo informó que las víctimas del ataque pertenecían a un grupo criminal y solicitó al gobierno federal más elementos de seguridad para acabar con el crimen organizado.

“El secretario de Seguridad federal, Alfonso Durazo, nos está brindando el apoyo, está en contacto con el comisionado estatal. Es lamentable lo que pasó, pero es gente que está involucrada con el crimen”, dijo Blanco Bravo.

Más homicidios. La actividad del crimen organizado siguió su curso en Morelos. A las 07:36 horas, personal del Servicio Médico Forense (Semefo) levantó los cadáveres de dos hombres en la carretera Alpuyeca-Grutas, municipio de Tetecala, surponiente del estado. La edad de las víctimas oscila entre los 20 y 25 años y ambas presentaron lesiones por disparo de arma de fuego. Tres horas después, a las 10:45, el Semefo levantó del cadáver de otro hombre en el municipio de Puente de Ixtla. El cuerpo se encontró envuelto con bolsas negras, amordazado y con las manos atadas. Por encima de las bolsas se halló un mensaje de amenazas entre presuntos integrantes del crimen organizado, cita el reporte oficial.

Posteriormente, a las 11:39 horas, personal del Semefo nuevamente acudió a levantar restos de un hombre colocados dentro de bolsas plásticas color negro abandonadas en el libramiento La Unión, municipio de Tetecala. Junto a las bolsas había un mensaje de amenazas del crimen organizado.

Secuelas de El Carrete. El crimen de los seis hombres en un autolavado se suma a los cinco jóvenes acribillados en una central de autobuses de Cuernavaca a principios de este mes, y en ambos casos las autoridades presumen la participación del crimen organizado.

El comisionado de Seguridad, José Antonio Ortiz Guarneros, declaró en su momento que los hijos de Santiago Mazari Hernández, El Carrete, líder del Cártel de Los Rojos, detenido en el estado de Guerrero, pretenden asumir el control de “la plaza” en la zona sur del estado y eso habría desatado la guerra contra otros grupos delictivos.

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