San Quintín, Baja California.- La gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda inauguró el Centro de Justicia para las Mujeres (CEJUM) para erradicar la violencia de género y ofrecer a las víctimas protección, empoderamiento y reconstrucción personal.
Con la Ceremonia de Agradecimiento a La Madre Tierra, organizada por pueblos originarios, la mandataria estatal habló de la importancia de este centro para quienes buscan apoyo y acompañamiento en momentos difíciles.
Este espacio contará con una sala de empoderamiento con el nombre de Lucero Rubí Ojeda Huerta, quien fue víctima de feminicidio y por la que se originó la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres en la entidad.
“Debemos de seguir trabajando todas las instituciones para erradicar los tipos de violencia y estamos aquí generando espacios para terminar con lo que durante mucho tiempo se normalizó. Para decirles a las mujeres que no están solas, que cuentan con un gobierno que las escucha y que les cree”, aseveró.
Dijo que en su gobierno una prioridad es la protección de las mujeres, por lo que con apoyo de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), se construyó el segundo CEJUM en Baja California y con ello se avanza en el cumplimiento de la Alerta.
En su momento, la coordinadora de Vinculación Estratégica Interinstitucional de la CONAVIM, Erika Marisol Troncoso Saavedra, expuso que para la realización de este Cejum se aplicó una inversión de 38 millones de pesos, 13 de ellos fueron aportación del gobierno federal y 25 millones del gobierno estatal.
Asimismo, resaltó la labor que realiza el Cejum Tijuana, donde este año se atendió a 2 mil 329 mujeres, mientras que en el año 2020 no se había prestado este servicio a ninguna, lo que demuestra la transformación en la vida de las beneficiarias.
A su vez, la directora del Cejum, Magdalena Bautista Ramírez, reconoció que este espacio representa un avance significativo en el acceso a la justicia para las mujeres que viven en situación de violencia con servicios integrales que aseguren que sus derechos fundamentales sean respetados y garantizados.
“Este centro, además de su atención integral, avanza en la reparación de una deuda histórica con las comunidades indígenas, proporcionándoles acceso a servicios legales, de salud, psicológicos, sociales y programas de empoderamiento”, mencionó.
Durante este evento, Jasiel Antonio, hijo de Rubí Ojeda, afirmó que la violencia tanto de hombres y mujeres está mal y la igualdad se debe generar ante todo. Acompañado de su abuela materna, respaldó la creación de más instalaciones del Cejum en el resto del país.
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