Este lunes 30 millones de estudiantes iniciaron el ciclo escolar 2020-2021 a distancia por la pandemia. En este regreso a clases , maestros y alumnos se enfrentan a una nueva forma de dar y recibir clases con la incorporación de plataformas, herramientas que para muchos docentes son difíciles de utilizar, como el caso del profesor que estuvo a punto de llorar y que se hizo viral por el apoyo que recibió de sus alumnos al momento que impartía una clase virtual , hecho que quedó grabado en un video .
“Está muy interesante y muy bonita su clase”, respondía uno de los 24 alumnos que tomaba clase de “Introducción a la técnica quirúrgica”, con el doctor y profesor Alfonso Huitrón, en Cancún, luego de que este se encontró con problemas para poder transmitir un video donde explicaría cómo practicar un lavado quirúrgico.
“Había preparado, con la ayuda de unas compañeras enfermeras del hospital (donde trabaja), un video para la práctica. En mi clase, los alumnos conocen los instrumentos y procedimientos naturales dentro de un quirófano. Es una materia práctica”, dijo en entrevista para EL UNIVERSAL, el cirujano general, Gustavo Alfonso III Huitrón Aguilar .
El profesor de Medicina de la Universidad Anáhuac en Cancún, en la Escuela Internacional de Medicina, menciona que las plataformas de internet son nuevas para muchos profesores como él, “somos de la época del disco de vinil”, dice entre risas. “Sientes un choque cultural y tecnológico”.
“Procuro buscar los videos apropiados para enseñar, pero nos es fácil encontrar alguno que no tenga errores. Decidí grabar uno con ayuda de mis enfermeras del hospital y quedó muy bien, yo lo veía en mi pantalla, pero a la hora de compartirlo mis alumnos no lo veían. Sentí una gran frustración. Sentí que había perdido la oportunidad de dar esa clase ”, relata el doctor, sobre el momento del video que se hizo viral.
El video sustituye lo que otrora sería una clase práctica, misma que tomaría por lo menos una hora y media de explicación y que en esta ocasión se ve reducida a unos cuantos minutos de explicación. Una realidad que al día de hoy es cada vez más común entre profesores que deben enfrentarse a encontrar la forma (sobre todo en la Medicina) de tener los recursos para explicar más allá de la teoría.
El procedimiento que iba a enseñar era cómo hacer un lavado quirúrgico . “En la práctica tengo que hacer uno y ellos repetirlo en varias ocasiones, porque es un entrenamiento mecánico. Nosotros, como médicos, debemos hacerlo en automático para no contaminar las áreas críticas”, dice.
Actualmente da clases cuatro horas y media a la semana, aunque quisiera que fuera más. “Hay mucho qué hacer”, afirma el doctor de 61 años, y se dice afortunado por tener los alumnos que tiene.
Comenzó como profesor adjunto en la universidad Panamericana en 1987, antes de terminar su carrera, dando algunas materias como Nutrición e Ingeniería biomédica. De pregrado hasta posgrado para especialistas en cirugía general. Desde hace 13 años reside en Cancún y hace tres regresó a la docencia.Su actividad principal es como cirujano general.
Ante la problemática del uso de nuevas tecnologías el profesor le dice a sus contemporáneos: “Somos cirujanos y tenemos que enfrentarnos a casos complejos. Estar comprometido con una actividad nos obliga a resolver el problema. Lejos de ser una gran dificultad para mi generación, tener que usar plataformas es algo a resolver. No es la primera vez que tenemos que hacer maravillas para un grupo (de estudiantes)”, dice con firmeza.
También comenta que tuvo la suerte de tener muy buenos maestros “creo que es lo que me impulsa (a dar bien una clase) En ese momento me sentí tan poco realizado al no haberla podido impartir como estoy acostumbrado pero creo que tenemos que adaptarnos. El que no se aclimata se ‘aclimuere’. Tenemos que empezar a hacerlo” finaliza.