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Cuernavaca.— Nueve internos del penal de Atlacholoaya fueron trasladados a las cárceles distritales de Jonacatepec y Cuautla, luego de que elementos de la Comisión Estatal de Seguridad (CES) catearon los dormitorios de máxima seguridad y decomisaron armas punzocortantes.
El director del Centro Estatal de Reinserción Social (Cereso), Jorge Israel Ponce de León Bórquez, informó que, desde la noche del martes y hasta la madrugada del miércoles, agentes policiacos inspeccionaron los dormitorios de los internos clasificados en máxima seguridad.
Además, en el transcurso de la mañana de ayer, la Comisión Estatal de Seguridad recibió el reporte de que se registró una riña entre internos, pero la situación fue controlada.
Sobre el operativo de revisión, la comisión informó que elementos del Grupo Operativo de Reacción Inmediata “Pantera” decomisaron 51 puntas metálicas hechizas de diferentes tamaños.
De acuerdo con las autoridades, este tipo de operativos de revisión serán aleatorios y constantes en cada uno de los dormitorios, a fin de evitar algún tipo de control o corrupción que vulnere la tranquilidad de las personas privadas de su libertad y del personal que ahí labora.
En junio pasado, se reubicó a siete internos del penal de Atlacholoaya a distintas cárceles del estado porque, según las autoridades, su integridad peligraba.
Al siguiente mes, la CES irrumpió en el penal de mediana seguridad porque la violencia entre grupos antagónicos regresó y dejó un saldo de cuatro internos muertos y tres heridos.
