De los 320 alcaldes en 23 estados que buscaron la reelección en el pasado proceso electoral en el país 188 lograron ampliar su periodo a otros tres años, mientras que 132 se quedaron en el intento al ser derrotados, la mayoría de militancia priísta.
En la mayoría de los casos, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) recurrió a sus aliados: los partidos Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza (NA) para intentar reelegir a sus más de 156 ediles, pero sólo 84 casos lograron consumarlo, mientras que 72 abanderados del tricolor salieron derrotados, de acuerdo con los resultados del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) de sus estados y los primeros conteos municipales.
El Partido Acción Nacional (PAN) apostó por ir en alianza con el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC) en la mayoría de sus alcaldes postulados, con los que consiguió la reelección en 64 de los ayuntamientos, contra 22 derrotas.
El PRD, en los municipios donde no tuvo aliados y compitió solo, logró que 10 de sus presidentes municipales repitan en el cargo, pero en 13 de los casos fue derrotado.
Las reglas
La reforma electoral de 2014 permitió a los alcaldes y diputados locales la reelección a partir de este proceso electoral sólo para el caso de los funcionarios que fueron electos en 2015.
En 23 entidades se renovaron ayuntamientos el pasado 1 de julio con excepción de Veracruz —que realizó su proceso el año pasado— y el caso de Puebla, donde las alcaldías fueron relevadas en 2013 y por única ocasión fue para un periodo de cuatro años ocho meses con el fin de empatar las elecciones locales con las federales de este año.
Las directrices en las que podían realizar campaña los alcaldes que buscaban reelegirse las determinó el OPLE de cada estado, por lo que fue diferente para cada entidad. Por ejemplo, en Coahuila los alcaldes que se reeligieron no estuvieron obligados a dejar el cargo y pudieron hacer campaña, pero en horario no laboral, el cual es fijado por cada cabildo. Situación similar se presentó en Chihuahua.
Radiografía
Dentro de los municipios importantes que tuvieron reelección en los estados están varias capitales, donde sus ediles no tuvieron el empuje para convencer a los votantes como en el caso de Monterrey, donde se vivió una cerrada contienda por los votos entre PRI y PAN.
El presidente municipal del PRI, Adrián de la Garza, logró 27% de los votos y fue derrotado por el panista Felipe de Jesús Cantú, con 29%.
En el estado de México, caso emblemático fue la derrota del alcalde priísta de la capital, Fernando Zamora Morales, quien obtuvo 78 mil 944 votos, equivalentes a 19.72% de las preferencias electorales, contra 157 mil 640 votos del abanderado de Morena, PT y PES, Juan Adolfo Sánchez Gómez, equivalentes a 39.38%.
En Quintana Roo, la alcaldesa Paoly Perera Maldonado, quien compitió por el PRI, PVEM y Nueva Alianza, fue derrotada por el aspirante de la coalición del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, José Esquivel Vargas, por apenas 679 votos.
En Sinaloa, el priísta Jesús Valdés Palazuelos, alcalde de Culiacán, quien se hizo llamar en campaña como Chuy Valdés, logró 34% de las preferencias electorales contra 44% del candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, Jesús Estrada Ferreiro. En este estado, el PRI perdió también la reelección de sus presidentes municipales ante la alianza de Morena, PT y PES en Mazatlán y Guasave.
En la capital de Tamaulipas, el presidente municipal priísta, Óscar Almaraz Smer, tampoco consiguió la reelección en su ayuntamiento al ser derrotado por el aspirante del Frente por Tamaulipas, Xicoténcatl González Uresti, quien lo superó con 40% de las preferencias contra 30% que obtuvo el edil.
En San Luis Potosí, el presidente municipal perredista, Ricardo Gallardo Juárez, fue derrotado por el abanderado del PAN y Movimiento Ciudadano, Xavier Nava, por casi el doble de sufragios, pues mientras el edil obtuvo 62 mil 980, el panista llegó a 112 mil 685 votos.
Sin embargo, hubo capitales que sí mantendrán a su alcalde por otros tres años como el caso de Coahuila, donde el presidente municipal Manolo Jiménez Salinas con 164 mil 974 votos logró 49.27%, lejos de su principal rival de la coalición Juntos Haremos Historia, Óscar Mohamar, quien se quedó con 24.8%.
En la capital de Chihuahua, la edil María Eugenia Campos Galván, quien compitió con el PAN y Movimiento Ciudadano, se mantendrá en el cargo al haber obtenido 161 mil 866 votos, esto es 52% de preferencias, y en el segundo lugar se quedó el abanderado de Morena, PT y PES, Fernando Bedel Tiscañero, con 26.69% de los sufragios.
En este estado, en Ciudad Juárez, uno de los municipios fronterizos más importantes, el alcalde independiente Héctor Armando Cabada —de los pocos ediles sin partido que buscaron la reelección— perdió por casi 5 mil votos contra Javier González Mocken, abanderado de Juntos Haremos Historia, quien obtuvo 34.68% de las preferencias contra 33.21% del alcalde independiente.
Lupa por inseguridad
En Guerrero, donde la violencia ha repuntado en los últimos años, ediles que buscaron la reelección fueron favorecidos por los resultados en algunos de los municipios más conflictivos, como en San Miguel Totolapan, donde Juan Mendoza Acosta logró reelegirse representando al PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, al igual que Jesús Parra García, candidato del PRI y PVEM, quien fue reelecto en el municipio de Chilapa con 31.29% de las preferencias.
También en Arcelia, el priísta Adolfo Torales se impuso con 55.81% de los votos. Pero el munícipe que no logró repetir en el cargo fue Gustavo García Bello, del PRD, PAN y Movimiento Ciudadano, en Zihuatanejo, donde fue derrotado por el priísta Jorge Sánchez Allec, quien obtuvo 42.70% de los sufragios.
Otro de los estados donde la violencia ha estado presente por la disputa de grupos criminales es Tamaulipas. Ahí, los alcaldes que perdieron la reelección fueron la panista Rosa Icela Corro Acosta, en el municipio de Miguel Alemán, y el priísta Jesús de la Garza Díaz, en Matamoros.
En Morelos, en los comicios del municipio de Amacuzac se dio una situación atípica a nivel nacional. El alcalde que buscaba reelegirse, el priísta Jorge Miranda Abarca, perdió la contienda contra su tío el abanderado de Morena, PT y PES, Alfonso Miranda Gallegos, pero ambos están presos en penales de alta seguridad por delitos como secuestro y organización delictuosa. En las urnas, mientras el edil priísta obtuvo 767 votos (11.97%), su tío lo venció con 3 mil 672 sufragios (57.31%).
Tanto la dirigencia estatal de Morena y sus aliados como la del PRI se han deslindado de sus candidatos a pesar de haber logrado el triunfo.