Lizbeth Vargas Barrios, una mujer que había sido reportada como desaparecida desde el pasado 2 de mayo, fue encontrada sin vida en el municipio veracruzano de Medellín, lo que ha generado una oleada de protestas ciudadanas en redes sociales.
La víctima, madre de dos niños de 3 y 5 años, fue localizada sin vida en la localidad de El Atracón del Medellín de Bravo y su pareja fue detenido como presunto responsable del crimen.
Los familiares de la madre de familia de 25 años habían reportado su desaparición el pasado 2 de mayo, cuando se le vio por última vez, al lado de su pareja, en su domicilio de la comunidad de El Moralillo del mismo municipio.
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De acuerdo con fuentes de la Fiscalía General del Estado, la pareja de la víctima fue detenido como presunto responsable del feminicidio y se espera que en las próximas horas se defina su situación legal.
Organizaciones feministas exigieron justicia por el crimen y la mentaron la alta incidencia de feminicidios.
Durante el periodo 2015-2022 cerca de la mitad de los feminicidios de niñas y mujeres menores de 18 años ocurrieron en seis entidades del país y Veracruz destacó como segundo lugar, según un estudio de análisis del Senado de la República mexicana.
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El Instituto Belisario Domínguez del Senado, dio a conocer que entre 2015 y 2022 seis estados concentraron casi la mitad de feminicidios del país, en primer lugar el Estado de México, con 17.3 por ciento de los casos; seguido en orden de gravedad, Veracruz con 8.7 por ciento; Jalisco con 7.3 por ciento; Chiapas con 6.0 por ciento; Nuevo León con 5.8 por ciento y; Puebla con 4.2 por ciento.
Aún más, si se consideran de manera conjunta los feminicidios y los homicidios intencionales en los 32 estados, se observó que en siete de ellos ocurrieron cerca de la mitad de los crímenes cometidos (49 por ciento).
Los estados más peligros por el número de casos en orden fueron Estado México (14.0 por ciento), Guanajuato (7.6), Jalisco (6.5), Michoacán (6.1), Chihuahua (5.7), Veracruz (4.6) y Zacatecas (4.5). En términos absolutos esta cifra se tradujo en el asesinato de 1 mil 157 niñas y adolescentes.
afcl