Puebla.—
Trabajadores y directivos de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) respaldaron las manifestaciones de protesta por el asesinato de tres estudiantes y un chofer de Uber; sin embargo, pidieron terminar con el paro de labores, luego de que la casa de estudios sufre afectaciones en distintas áreas.
“Una exigencia legítima, necesaria y prioritaria, no sólo para las instituciones de educación superior, sino para la sociedad en general”, expusieron, pero llamaron a levantar el paro estudiantil.
En un mensaje conjunto, los trabajadores, direcciones y vicerrectorías revelaron que el paro provocó la suspensión de la emisión de la convocatoria del proceso de admisión 2020, perjudicando a más de 80 mil aspirantes.
Así como la suspensión de los servicios de atención médica en la Unidad Médico Familiar; el impedimento en la realización de trámites de la Dirección de Administración Escolar, como expedición de títulos y citas para exámenes profesionales, certificados de estudio y captura de calificaciones de especialidades médicas.
Además, la afectación de la entrega de becas a nivel medio superior, impactando a 19 mil 666 estudiantes y otro tipo de becas como las de Telmex y la alimenticia.
Retrasos en la postulación de becas de nivel de posgrado ante el Conacyt; la imposibilidad de procesar la nómina de la primera quincena de marzo y las siguientes.
La afectación del derecho a la educación de los menores del Círculo Infantil en un ambiente libre de violencia; interrupción de la agenda del seguimiento del bienestar emocional (depresión, ansiedad, tendencias suicidas, violencia, etc.) y médico de la Dirección de Acompañamiento Universitario, entre otras muchas actividades.
“Es necesario reanudar las actividades, considerando como una alternativa viable para todas las partes el paro activo hasta lograr los objetivos que motivaron este movimiento”, demandaron.
Cuarto día de protestas
La mañana del pasado lunes, ciudadanos reportaron a los servicios de emergencia la aparición de cuatro cuerpos en la localidad de Santa Ana Xalmimilulco, del municipio Huejotzingo.
Las víctimas fueron identificadas como dos colombianos, estudiantes de Medicina (mujer y hombre) de intercambio de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), institución privada, y uno de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), quien cursaba la misma carrera.
La cuarta víctima era un chofer que había trasladado a los jóvenes a las fiestas de Huejotzingo.
Ayer, por cuarto día consecutivo, la comunidad estudiantil de Puebla llevó a cabo manifestaciones de protesta por el asesinato de tres de sus compañeros y de un chofer de Uber, el pasado lunes.
Estudiantes de escuelas públicas y privadas se sumaron a la oleada de movilizaciones que iniciaron desde el martes pasado por el multihomicidio ocurrido en el municipio de Huejotzingo.
En los accesos de universidades privadas, institutos y centros escolares —ahora hasta de preparatoria—, se manifestaron los estudiantes para exigir justicia por Javier Tirado Márquez, Ximena Quijano Hernández, José Antonio Parada Cerpa y el chofer Josué Vital.