Más Información
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Luego de informar a los maestros de las mesas de trabajo que continuarán este miércoles, así como de convocarlos a regresar a clases, los maestros reunidos en el plantón se inconformaron con la decisión de su líder, con gritos de “¡Ni un paso atrás!” y “¡Fuera Aimé!”.
El secretario general de la Sección 30 del SNTE, Arnulfo Rodríguez Treviño, encabezó una reunión frente a las instalaciones de la Secretaría de Educación en Tamaulipas (SET), que habían estado tomadas desde la madrugada del 5 de septiembre.
Su llegada fue entre gritos de apoyo y mucha expectativa entre los maestros, quienes deseaban conocer detalles de la reunión y los acuerdos en la Ciudad de México.
Leer también: Tamaulipas regresará este miércoles a clases, anuncia Luisa María Alcalde
Arnulfo Rodríguez explicó que llegarán dos comisiones, una con enviados de la Secretaría de Educación Pública (SEP), y otra del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del SNTE, para trabajar en los 22 puntos del pliego petitorio.
Dijo que por la tarde trabajarán sobre los problemas de las primarias y secundarias, así como del Usicamm; mientras que para el jueves serán todas las escuelas preparatorias, Cecati, CBTIS y CBTAS, “y entre más pronto se reúna la documentación, más pronto se dará la respuesta”.
Durante la intervención al micrófono de Rodríguez Treviño, presumió el buen trato que recibió de parte de las autoridades en la Ciudad de México.
Luego, cuando decía lo siguiente: “Hemos acordado el Comité Ejecutivo Nacional, por respeto a México, a nuestro presidente, a nuestro sindicato, y por respeto al ideal de cada maestro, hemos enfrentado hasta este momento, lo digo con todo mi corazón, hay muchas maneras de como luchar, y ya no queremos afectar más a los niños”, comenzaron los problemas, ya que fue interrumpido por el grito “¡Ni un paso atrás! ¡Ni un paso atrás!”.
Leer también: Protesta de maestros, ya con tintes políticos, no educativos: gobernador de Tamaulipas
Rodríguez Treviño intentó calmarlos, “compañeros, no estamos claudicando, la lucha sigue pero fuera de actividad escolar; nosotros”.
Y volvió a ser rebasado por la gritería: “¡Fuera Lucía!”, “¡La base no la quiere!”, y “¡Ni un paso atrás!”.
Para entonces, ya reflejaba malestar, “compañeros, con eso no vamos a ganar nada, yo les agradezco a ustedes esa manifestación para que digan que no fui yo”. Después le pidió a la prensa que lo dejaran dialogar con los maestros.
Al salir los reporteros del lugar, algunos fueron agredidos por profesores.
Durante la noche, los manifestantes comenzaron a levantar sus toldos y campamentos, muchos mostraron malestar por la decisión que tomó su líder y en otros más había confusión, al no quedarles claro el rumbo que tomaría su lucha sindical.
