Quien se quitó una losa de encima en Colima, nos cuentan, fue el gobernador Ignacio Peralta Sánchez (PRI), pues andaba con el Jesús en la boca porque la entidad enfrenta la peor crisis financiera y no tenía dinero para la nómina de más de 11 mil trabajadores, quienes estaban a punto de irse a paro. Nos comentan que don Ignacio (quien forma parte de la casi extinta Alianza Federalista) se encomendó a todos los santos y aprovechó la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador para limar asperezas y conseguir algo así como 800 millones de pesos de recursos extraordinarios para poder concluir su administración, a lo que don Andrés Manuel accedió, pero se tomaría de las participaciones federales futuras, lo que representó un salvavidas para la entidad. Sí que se levantó con el pie derechos don Ignacio.

¿Revivirán combate a huachicol ahora como versión 2.0?

En Puebla, nos comparten que la reciente incursión policial en el municipio de Quecholac avivó el avispero político y social en esa zona azotada por el huachicoleo. Nos explican que el anuncio del gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta (Morena) de que van contra Antonio Martínez Fuentes , alias El Toñin, presunto líder huachicolero, hizo levantar más de una ceja, pues para nadie es un secreto que este personaje es primo-hermano del actual alcalde del lugar, Alejandro Martínez Fuentes (PSI), quien fue reelecto en la elección pasada y donde, nos dicen, hace décadas hay indicios de que autoridades y delincuencia son uno mismo, por lo que ahora varios se cuestionan si el Estado logrará imponerse o nuevamente será una simple llamarada de petate.

Critica góber “viaje de despedida” de diputados locales

Desde Guanajuato, nos platican, al gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo (PAN) no le cayó muy bien que digamos el viaje que hicieron 12 diputados locales —entre ellos Magdalena Rosales Cruz (Morena), Jesús Oviedo Herrera (PAN) y Vanessa Sánchez Córdero (PVEM)— a Chicago, Estados Unidos, hace un par de semanas para un “evento con migrantes guanajuatenses”, porque lo hicieron en plena recta final de su periodo legislativo. Nos dicen que, sin darle vueltas al asunto, don Diego les pidió que cumplan con su trabajo legislativo hasta el último día, que desquiten el sueldo y no caigan en abusos antes de irse, pero de paso los exhortó a que se corten las uñas y que ni piensen en darse bonos por término de su cargo. Más claro ni el agua.