Chilpancingo. El obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, consideró que en el caso de la niña Camila, que fue secuestrada y asesinada y luego la presunta responsable murió tras ser linchada, las autoridades fueron indiferentes.
En entrevista con reporteros al término de una misa en la catedral de Chilapa, González Hernández se refirió al asesinato de la niña de ocho años, Camila Gómez Ortega.
“Son mártires que reclaman los derechos de todos y que todos somos garantes de los indefensos, de los inocentes”.
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A González Hernández se le cuestionó sobre la actuación de las autoridades en el caso Camila, donde primero la niña fue secuestrada y asesinada y luego una tuba sacó de su casa a la familia que acusaron de ser los responsables del crimen.
“Nosotros decimos que no sean indiferentes, estamos viendo el delito y no lo detenemos. Es como dice un pensamiento aquí en Chilapa, que si no puedes evadir un delito al estar presente con ellos, si lo consientes, también eres cómplice”, dijo González Hernández.
Indicó que las autoridades deben hacer cumplir la ley y garantizar los derechos, pero en este caso no lo hicieron.
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“Entonces la indiferencia sería de toda la sociedad, pero en especial para el gobierno, que se muestra indiferente ante tantos crímenes y tantos delitos que se pudieran evadir y no se hace”.
Sobre el linchamiento de Ana Rosa Aguilar Díaz y sus hijos Alejandro y Alfredo Estrada Aguilar, presuntos responsables del feminicidio de Camila, el obispo opinó que pasó por la falta de justicia.
“Como humanos nos hace falta controlar todos esos espíritus que nos mueven dentro, seguramente de injusticia, seguramente falta de que se cumpla la ley y que la justicia que no hay, uno lo hace”, comentó.
Agregó: “Y así se está haciendo en todo México, aquí los grupos armados en el fondo, es porque no hay justicia y ellos la hacen. La gente recurre a ellos y así la sociedad se nos puede levantar, si no hay lo mínimo que garanticen los derechos humanos”, consideró.
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