Pachuca.- De ser uno de los grandes activos del PAN y presumir su cercanía con Ricardo Anaya, el ex presidente municipal de Zimapán Hidalgo, Erick Marte Rivera Villanueva, pasó a ser un prófugo de la justicia en un escape digno de un guion de película, al fingir un desmayo en una audiencia por un proceso de discriminación y escapar a bordo de una ambulancia.
Al concluir su mandato en la alcaldía de Zimapán, apenas en octubre pasado, el ex alcalde buscaba seguir en el servicio público. Por ello buscaba la candidatura a diputado federal, cargo que ya había ocupado entre 2012 y 2015, pero en el camino se le atravesó una denuncia de la también panista Malinalli Gámez Cedillo, quien había sido su compañera en la administración municipal como regidora.
Gámez Cedillo lo acusó de violencia política en razón de género, por lo cual el pasado 7 de enero se le dictó la vinculación a proceso.
La historia inició en enero de 2020. Durante una sesión de cabildo el ex edil dijo a la exregidora: “no es diálogo. A ver, no es. Nada más ubícate. Yo te entiendo, tus limitaciones, yo soy muy comprensivo de eso, pero también tengo la paciencia de poder platicar cada tema”.
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Con la grabación de ese momento y otras pruebas se dictó la vinculación a proceso y se ordenó dar vista a las autoridades electorales, para que en caso de pretender participar como candidato un cargo de elección federal se adoptarán las determinaciones que conforme a derecho correspondieran.
Con ello se vinieron abajo sus posibilidades de postularse como aspirante a diputado federal, pese a que ya contaba con el aval de su partido. En su lugar decidió apoyar a quien había sido su titular de Finanzas, Giovani González.
La fuga
