Irapuato.— Andrea Guerrero Rodríguez, presidenta del comité local de la plataforma global AIESEC, encuentra dos polos opuestos en el estado de Guanajuato, su tierra natal: el del desarrollo industrial y el de la falta de oportunidades para una vida digna.
La joven de 20 años, estudiante de Ingeniería en Gestión, considera que a los políticos de su estado les falta “jalar parejo” con la población, porque desde la autoridad se cuida mucho la relación con las industrias internacionales, pero se deja de lado el trabajo digno, los mejores salarios y la calidad de vida de las familias.
En medio del proceso electoral, Andrea comenta que entre la población juvenil se percibe apatía. “Los chicos se van desilusionado con todo lo que ven, ya no confían, no quieren saber de política”, explica.
No obstante, dice, hay algunas excepciones, como el diputado jalisciense Pedro Kumamoto, a quien considera como un ejemplo de que con esfuerzo y dedicación es posible que en la política resuenen otras voces.
El objetivo de la organización que la guanajuatense representa es alentar a los jóvenes para que sean más participativos y vean el poder que tienen en sus manos si deciden trabajar en favor del mundo. En ese sentido, asegura que ella está realizando círculos de discusión, donde se analizan las propuestas de los candidatos.