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Cancún.— Como parte de los trabajos para combatir el sargazo en la playas de la Riviera Maya, se instala una barrera de más de 1.2 kilómetros de extensión, especialmente diseñada para contener la macroalga antes de que llegue a las costas mexicanas.
Este proyecto lo lleva a cabo Grupo Vidanta —desarrollador líder de complejos e infraestructura turística en México y Latinoamérica—, que colabora con las acciones que realiza en la región el gobierno federal, a través de la Secretaría de Marina (Semar).
El programa de recolección y disposición final de sargazo, cuya instalación inició el pasado 3 de julio, incluye “una barrera de más de 1.2 kilómetros de extensión, especialmente diseñada para contener dicha alga marina antes de que llegue a las playas sin dañar el ecosistema”, señala la empresa en un comunicado.
“Conscientes del problema que representa para la industria turística y para la salud pública en general, Grupo Vidanta considera que el sargazo es un asunto en el que todos debemos participar, por lo que, fiel a su constante compromiso de proteger el medio ambiente, comenzó un proyecto que evitará que esta alga marina llegue a sus playas en la Riviera Maya, recolectándola y transportándola para su disposición final en la que será procesada como composta”, indica la empresa.
Explica que el proyecto consta de una barrera que se instala en el mar y “destaca por su fácil manejo y mantenimiento durante la temporada de huracanes”.
Subraya que la malla que se utiliza es muy fina y tiene un doble beneficio, ya que evita atrapar vida marina “y ha demostrado ser altamente eficiente para la contención de la contaminación de plásticos.
“Una vez que dicha alga marina es retenida en la barrera, ésta es recolectada y transportada para su procesamiento final”, señala.
El problema del sargazo no es exclusivo de México, sino que tiene repercusiones a nivel internacional.
De acuerdo con expertos, el problema parece provenir del norte del Atlántico y afecta las costas de Centroamérica y el Caribe, lo que incluye las playas de Quintana Roo, así como la Riviera Maya, Playa del Carmen y Cancún.
Expertos han señalado la importancia de cosechar el sargazo en altamar y evitar su llegada masiva y su descomposición en la costa, lo cual daña la playa, los pastos marinos, el agua del mar y los arrecifes. También desprende un olor que ahuyenta al turismo y afecta a los prestadores de servicios.
En este contexto, Grupo Vidanta se une a los esfuerzos que llevan a cabo de manera conjunta los gobiernos federal, estatal y municipal para detener el arribo masivo de sargazo y evitar así un daño al ecosistema. Estas acciones también son parte de un compromiso en favor de la protección del medio ambiente.