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Tijuana.— La sobrecarga de trabajo que mantienen el Servicio Médico Forense (Semefo) y las funerarias de esta ciudad resultó en una manifestación de vecinos, en la entrega de una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en Baja California, así como en la exigencia de reubicar estos espacios.
Los inconformes son habitantes de las colonias Juárez, Cacho y Madero Sur, aunque vecinos de El Rubí y Morelos también comienzan a sumarse a la causa. Todos ellos viven desde hace años en las cercanías del Semefo ubicado en el bulevar Fundadores.
El problema, según explicó Rafael Cruzmanjarrez, representante legal de residentes, es que desde 2017 el trabajo del Semefo y las funerarias incrementó a consecuencia del repunte de violencia en esta ciudad fronteriza: sólo entre enero y octubre se contabilizan 2 mil asesinatos.
“El índice de contaminación es más agresivo. El problema es que las instalaciones no están preparadas para el incremento de la violencia y de la cantidad de cuerpos; ya hubo señalamientos por no cumplir con las normas de sanidad y vemos que no ha cambiado nada”, advirtió.
Este lunes los residentes afectados interpusieron una queja ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) debido a que las autoridades no han resuelto el problema que los aqueja desde hace meses.
Apenas un par de días antes, unos 200 vecinos de las colonias afectadas se manifestaron para exigir la reubicación del Semefo, también externaron su preocupación por desconocer los niveles de contaminación a los que, aseguraron, están expuestos debido a los contaminantes que hay durante las cremaciones.
El presidente de la Comisión de Desarrollo Económico de Tijuana, Manuel Rodríguez, anunció que solicitará una moratoria de usos de suelo a crematorios y comercios dedicados a la prestación de servicios funerarios e inhumación de cuerpos, a fin de verificar su operación y, si fuera necesario, pedir su reubicación o clausura.
En diciembre, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente ya había detectado irregularidades en el manejo de los cuerpos en el Semefo de Tijuana, por lo que lanzó una advertencia de clausura de las instalaciones. A 10 meses, las inspecciones continúan.
