Cancún, Q. Roo.- El cronista de Cancún, Fernando Martí Brito indicó que existe sustento histórico para modificar el nombre del municipio de Benito Juárez, como lo ha propuesto la alcaldesa, "Mara" Lezama, toda vez que “Cancún” era el nombre original de la isla antes de que se decidiera desarrollar aquí el primer Centro Integralmente Planeado (CIP) del país.
El periodista -autor del libro “Fantasía de Banqueros”, que narra el diseño del destino turístico y su ciudad- fue el primero en poner sobre la mesa la propuesta de modificar el nombre oficial del municipio de Benito Juárez y sustituirlo por el de la ciudad, que es Cancún.
Años después, el entonces edil, Gregorio Sánchez (2008-2011) retomó la iniciativa, sin tener éxito. Durante las campañas políticas de este año, su esposa, Niurka Sáliva, quien contendía por la presidencia municipal, rescató la idea, la cual fue criticada por su Isaac Janix y apoyada por “Mara” Lezama y sus contendientes.
El domingo pasado, al rendir protesta como alcaldesa, Lezama anunció que promovería la sustitución del nombre del municipio para aprovechar la fuerza de la “marca” Cancún y para eliminar la percepción de división entre la ciudad y el centro turístico.
El tema ha provocado intensas reacciones que van desde las críticas, pasando por la oposición -incluso del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que postuló a la comunicadora como candidata- hasta las manifestaciones de apoyo y las burlas en redes sociales.
Ante ello, Lezama Espinoza ha declarado que se diseña la estructura de una consulta pública, para que sea la ciudadanía la que decida.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Fernando Martí dijo que hay bases históricas para sustentar el cambio de nombre, porque “Cancún” no sólo es una marca, sino el nombre original de la isla que, aseguró que aparece en mapas desde 1749 y en el Ensayo Político sobre la Nueva España, escrito por el Barón Alexander Humboldt, en 1836
En efecto, la referencia aparece en la página 75 del cuarto tomo del extenso escrito, consultado por este diario, en donde se lee: “Este año ha habido tres naufragios en la isla de Cancún y el bajío del Alacran”.
“Yo no estoy a favor, ni en contra, lo que digo es que sí hay fundamentos históricos para impulsar la modificación. Creo que lo mejor será hacer una consulta y preguntarlo a la gente”, expuso el cronista.
El cronista aclaró que la idea de bautizar como Benito Juárez al municipio, provino de David Gustavo Gutiérrez Ruiz, último gobernador de lo que fue el “territorio de Quintana Roo”, que el ocho de octubre de 1974 se elevó a categoría de estado.
“Cuando nació Cancún se le acusó de ser un proyecto extranjerizante. Entonces cuando se convoca al Congreso Constituyente, cuyo líder era Pedro Joaquín Coldwell (actual secretario de Energía) se decide ponerle a cinco de los siete municipios, el nombre de próceres de la historia, uno de ellos fue Benito Juárez".
“Así está plasmado en la Constitución del estado de 1975. Los otros dos municipios quedaron con el nombre de Cozumel e Isla Mujeres. Entonces lo que creo es que para efectos políticos, se eligió el nombre de Benito Juárez, pero en un sentido práctico, muy poca gente lo identifica o relaciona con Cancún, que es el nombre antiguo de lo que fue la isla Cancún”, explicó.
El también escritor consideró que la sustitución del nombre del municipio requiere de un correcto soporte documental, “pero no decir que es para aprovechar o mejorar la marca. Eso no suena bonito; creo que lo que ha pasado es que falta darle seriedad a la propuesta, porque de lo contrario parece una frivolidad”.
Agregó que tampoco es un procedimiento sencillo, porque de entrada implica modificar la Constitución. Según declaraciones de Lezama Espinoza, existe ya una solicitud en la actual Legislatura.
Entrevistada por separado, Tiziana Roma, pionera y divulgadora de la historia de la ciudad, reiteró su rechazo a la modificación del nombre oficial del municipio, tal y como ocurrió durante el mandato de “Greg” Sánchez.
“Me parece muy ocioso volver a lo mismo. Hay que entender que una cosa es el municipio de Benito Juárez, cuyo nombre tiene una razón de ser y otra cosa es la cabecera, la ciudad de Cancún. Que porque uno sea el nombre político y otro una marca, no es tema.
“Tampoco lo es el argumento de que si nos llamamos cancunenses, por qué no ponerle al municipio el nombre de Cancún. Yo soy cancunense y vivo dentro un municipio que abarca otras localidades, o sea, dentro del municipio hay algo más que Cancún, a menos que detrás exista la idea de desaparecer la delegación de Alfredo V. Bonfil para declararla un municipio, como hicieron con Puerto Morelos”, señaló.
Roma subrayó que no entiende cuál es la idea de “desaparecer” o de “prescindir” de Benito Juárez, que define al municipio como un territorio laico. En cuanto a la ciudad, destacó que la traza urbana de su zona fundacional, está inspirada en las Leyes de Reforma que establecen la separación Iglesia-Estado.