Tijuana.- La Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) informó sobre el hallazgo de un túnel clandestino , situado a unos pasos del muro que divide Tijuana de Estados Unidos, en las inmediaciones del aeropuerto de la ciudad y al área industrial, en la delegación Otay Centenario.
De acuerdo con trabajadores del área, elementos del Ejército Mexicano llegaron al sitio desde el miércoles casi a la medianoche y desde ese momento, resguardaron el terreno ubicado sobre bulevar Aeropuerto, en Ejido Tampico.
Apenas unas horas antes de que llegaran soldados al terreno, algunos de los residentes del área, narraron que había gente dentro del predio en donde además había camiones de carga que entraban y salían todos los días, quienes tuvieron tiempo de salir y sacar los vehículos además de otros artículos, antes de que llegaran alguna autoridad.
“A diferencia de otros camiones estos solo eran blancos y no tenían ni logotipos, nada, nada que los identificara, todos por lo regular tienen su imagen o el nombre a un costado o algo, el membrete, pero ellos nada, solitos y así andaban”, dijo un chofer de camiones que prefirió no ser nombrado en la nota.
Otro de los testigos del operativo, recordó que hace menos de tres meses un vehículo con tres cuerpos fue abandonado justo frente a ese terreno.
Hasta el jueves, antes del mediodía, agentes federales se trasladaron al lugar, en donde se informó no solo la existencia del túnel sino también la sospecha de droga escondida adentro del terreno, en el que solamente desde afuera pueden ser observados paletas de madera para cargar mercancía.
Alrededor de esa área han sido hallados otras construcciones subterráneas y clandestinas durante los últimos años, una de ellas a unos cuantos metros del nuevo hallazgo, en donde contaban con sistema de ventilación, iluminación e incluso a lo largo del recorrido fue encontrado un altar con figuras de la virgen María.
Aunque el comandante de la Segunda Zona Militar, el general Pablo Alberto Lechuga Horta confirmó el hallazgo, no dio ninguna información sobre las características del inmueble ni sobre cómo se dio con el sitio, que quedó bajo resguardo del Ejército Mexicano y la Policía Municipal de Tijuana.
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