San Cristóbal de las Casas .- El cuerpo de Miriam Judith Salgado Figueroa , mujer de 43 años de edad desaparecida el 19 de agosto del 2021 durante labores de búsqueda de su sobrina Elizabeth Elena Laguna Salgado , de 26 años, chiapaneca desaparecida en abril del 2015 en los Estados Unidos, fue hallado el domingo en Utah.
Libertad Salgado Figueroa, madre de Elizabeth Elena, dio a conocer en una entrevista a medios de comunicación de los Estados Unidos que los restos de su hermana fueron hallados el 5 de marzo en Utah.
“Encontraron los restos de mi hermana Miriam Judith Salgado Figueroa, de la misma forma que encontraron a mi hija Elizabeth Elena Laguna Salgado”, anunció Libertad en su cuenta de Facebook. “Pedimos justicia ya son dos muertas que son encontradas en la misma condición”, agregó.
Foto: Archivo/Elizabeth Elena Laguna Salgado
En el caso de Miriam Judith, explicó, es ciudadana de los Estados Unidos, por lo que pidió al FBI, “para que pueda interceder en el caso, ya que no podemos con tanto dolor. Clamamos que se haga justicia y que encuentren al asesino y que si alguien sabe algo por el amor de Dios que ya no siga callando necesitamos su ayuda”.
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El 16 de abril del 2015, Elizabeth Elena desapareció después de salir de la escuela de inglés en Provo, Utah, donde había llegado el 23 de marzo de ese año, procedente de Tuxtla, en Chiapas, con visa de estudiante que le otorgó la embajada de los Estados Unidos en Ciudad de México.
Fue hasta el 23 de agosto del 2018 que un automovilista halló los restos de la joven en el Cañón de Hobble Creek Cayon, ubicado a 82 kilómetros de distancia la escuela de inglés, donde Libertad salió rumbo a un restaurante la tarde del 16 de abril del 2015. Le dio tiempo de avisar a su hermana que ese día habían concluido sus clases. “Ya salí de la escuela”, escribió desde su teléfono iPhone.
El 11 de abril, Elizabeth Elena, egresada de la carrera de ingeniería del Instituto Tecnológico de Tuxtla, había participado en un picnic Breack the Faskt con los jóvenes mormones de la iglesia a la que asistía.
Ahora se sabe que Elizabeth Elena habría convivido con el feminicida. “Los testigos que vieron a Elizabeth Elena interactuando con su asesino durante la semana de exámenes a finales de abril del 2015, eran estudiantes de BYU Engineering y Utah Valley University fuera del estado y probablemente habían regresado a casa cuando se descubrió el cuerpo en mayo del 2018”, ha dicho doña Libertad.
“Danos un nombre. ¿Con quién estaba socializando Elizabeth Salgado en Kelly's Grove Park el fin de semana antes de que desapareciera? Serán bendecidos en gran manera por ayudar a resolver el caso de mi hija Elizabeth y dar paz a mi familia y descanso eterno a mi hija Elizabeth y también a más jovencitas por que la persona que cometió este crimen sabía que mi hija era vulnerable y que no íbamos a poder tan fácil irla a buscar. Por favor ayúdenos”, ha pedido Libertad Salgado Figueroa.
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Durante las dos semanas que Elizabeth Elena estuvo en clases de Provo, Utah, conoció a “muy pocas personas”, que “deben ser investigadas a profundidad”. “Por ahora señala (la investigación) que probablemente el asesino está dentro de la iglesia Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”.
“Pedimos ayuda a la comunidad de la iglesia en especial a los jóvenes para que puedan ayudarnos y pueda dar información a la policía de con quién hablaba o se relacionaba mi hija Elizabeth si tienes información por más mínima que sea puedes llamar al detective privado Jason al 801-759-2248 o al Sheriff del Condado de Utah al 801-851-4000 Dios los bendiga”, ruega Libertad Salgado Figueroa.
En el caso de Miriam Judith Salgado Figueroa, horas después de que desapareció durante labores de búsqueda de su sobrina, fue hallado su automóvil abandonado en la zona desértica de Virgin, Utah, en la Gould Wash Road.
En declaraciones a una televisora de los Estados Unidos, doña Libertad considera que el caso de su hija y su hermana están relacionados. “En parte sí, porque el agresor nos veía desde que nosotros empezamos a buscar a mi hija y mi hermana me acompañó muchas veces. Entonces el agresor está viéndonos. A veces decía yo: ¿No será alguien de aquí, de los que está?, porque yo tengo también mi sospecha, que puede ser el agresor, que haya hecho esta crueldad de mi hermanita Miriam Judith”.
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