Cancún, Q. Roo.- La Ocean Futures Society , creada por el explorador acuático, Jean Michael Cousteau , se sumó a la solicitud de ambientalistas, investigadores, académicos, artistas y músicos, para que el presidente, Andrés Manuel López Obrador , les escuche y recorra con ellos el Tramo 5 por donde comenzó la devastación de selva, como parte de los trabajos del megaproyecto del Tren Maya , de Cancún a Tulum, obras que ponen “en grave peligro la fuente de la vital agua”, a nivel subterráneo.
“Es importante destacar que durante el recorrido, los expertos le proporcionarán al Sr. Presidente la información técnica que justifique la razón por la cual no es viable la construcción del Tren Maya de la manera en que se está ejecutando, debido a que las obras se han hecho sin contar con el imprescindible estudio de impacto ambiental”, detalla la organización, en una carta pública dirigida al mandatario federal.
La agrupación expresó su “completo” apoyo al movimiento ciudadano, resaltando la “honestidad” de sus peticiones y aclarando que no existe un interés económico ni político detrás de la batalla legal y social para defender la selva, la fauna y los sistemas de ríos subterráneos y de cavernas sumergidas más grandes del mundo, que conforman un ensamble de ecosistemas que incluye la duna costera, los manglares, los pastos marinos, el agua del mar y los arrecifes de coral.
“El Sr. Presidente López Obrador puede estar tranquilo ante nuestra posición, que tiene en cuenta ante todo, la conservación y la integridad de los ecosistemas.
“Podemos asegurarle que no estamos pagados por nadie para hacer público este comentario y que siempre hemos creído que la buena voluntad debe imperar en las relaciones humanas”, se señala en el texto de la misiva.
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El Grupo Costeau añadió que ha participado en exploraciones, filmaciones, investigaciones y contribuido en numerosos estudios ecológicos en México, durante más de 40 años y saludó a quienes han levantado la voz por la defensa de la Madre Naturaleza.
Foto: Teuctzintli Vázquez / EL UNIVERSAL
“No podemos olvidar que nadie es dueño de un país y que cada generación debe velar por tratar de dejarlo en mejor estado de cómo lo recibió en su momento”, concluye el escrito, firmado por el director general de la organización, para América Latina, Rubén Arvizu.
“No podemos esperar a que el daño esté hecho”.
Por separado, la organización Centinelas del Agua, con sede en Playa del Carmen , precisó que lo que se está solicitando al gobierno federal, expresamente a López Obrador, es que frene los trabajos de tala de la selva que se realizan de manera ilegal, al carecer de permisos de impacto ambiental y forestales.
“Aquí es un área forestal. Lo primero que debió hacerse es el estudio forestal, decir qué es lo que hay ahí; qué especies, cuántas, de qué tamaño; qué es lo que se va a tumbar. Por otro lado debieron hacer estudios sobre impacto ambiental; estudios de topografía, estudios hidrológicos y otros.
“Con base en esos estudios se presenta la MIA (Manifestación de Impacto Ambiental), por ejemplo, para que se evalúe el proyecto y se determine si éste es factible ambientalmente o no. Lo mismo en materia forestal. Eso es para cualquier proyecto, sobre todo para cualquier obra que implique un cambio de uso del suelo”, explicó, Otto Von Bertrab, de dicha organización.
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Estos estudios no se han hecho, dijo en entrevista con EL UNIVERSAL . Tampoco la MIA ni el Estudio Técnico Justificativo (ETJ), porque su elaboración tarda más de seis meses.
“No lo hicieron por prisa, pero se tiene que hacer y se tiene que hacer antes de deforestar, porque en el caso de Playa del Carmen a Tulum se van a dar cuenta que no es factible porque hay cantidad de ríos subterráneos; le van a pegar a todos estos afluentes subterráneos de Sac Actun, Dos Ojos y los efectos hacia el agua, hacia el agua potable y recreativa van a ser terribles
“No podemos esperar a que el daño esté hecho. Por eso, por ley se tiene que detener, pero en lugar de eso están entrando con máquinas directamente, a deforestar”, subrayó.
En febrero pasado Von Bertrab estuvo llevando a personal del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) de Sedatu, del Grupo México, encargado de la mitad del Tramo 5 , a distintos puntos para revisar la fragilidad de las cavernas.
“Ellos mismos me dijeron que va a ser imposible, pero ‘lo que diga el presidente’. Y me advirtieron que tenían un mes para liberar el tramo, porque vendría el presidente y tenía que estar liberado, entonces tienen la presión de hace algo que debe llevarse años.
“Va a ser un desastre. Se tiene que repensar. La solución que hemos planteado empresarios, asociaciones y ciudadanos es que el Tren Maya está muy bien de Palenque hasta Cancún. Se va a lograr, ya está el tramo. Que lo terminen bien y va a funcionar. Pero el Tramo de Cancún a Tulum se tiene que detener. No tienen estudios, hay demasiadas prisas, no es necesario. Sería una salida muy digna”, aseguró.
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