Monterrey.- El gobierno estatal tiene ya el control total de los cinco penales de Nuevo León, y ahora va por la certificación internacional de los cuatro reclusorios que permanecerán en operación, después que para el 30 de septiembre o la primera semana de octubre sea cerrado de manera definitiva el penal del Topo Chico , afirmó el secretario General de Gobierno , Manuel González Flores.
El funcionario señaló que como parte de ese plan de controlar y certificar los reclusorios de la entidad, que el gobernador Jaime Rodríguez se propuso llevar a cabo desde el arranque de su administración, ante los problemas de violencia e ingobernabilidad que enfrentaba el sistema estatal penitenciario , este día fueron trasladados 199 internos, entre hombres y mujeres , hacia penales de Guanajuato, Michoacán, Chiapas y Morelos, sin que se presentaran protesta de los reos o sus familiares como en ocasiones anteriores.
El operativo inició durante la madrugada, y según boletín que emitió el área de comunicación social, fueron llevados al reclusorio de Guanajuato 99 internos de los tres penales varoniles del estado (Topo Chico, Apodaca y Cadereyta), mientras 20 mujeres fueron trasladadas al reclusorio federal el femenil de Coatlán, Morelos.
Pero después del mediodía, el secretario Manuel González dijo en entrevista que aún continuaba el operativo, y para ese momento habían sido llevados a dichos reclusorios de Guanajuato y Morelos, además de penales Chiapas y Michoacán, un total de 199 presos.
González Flores dijo que este operativo es el anuncio del principio del final del cierre del Penal del Topo Chico, pero no se darán a conocer ni las fechas ni los momentos de los traslados hacia los penales de Cadereyta y Apodaca, porque “son operativos de mucho riesgo que deben llevarse con sigilo”.
El funcionario afirmó que en los cinco centros de reclusión del estado, incluyendo los de jóvenes y femenil, hay total gobernanza y control por parte de las autoridades penitenciarias, por lo cual ya están en proceso de obtener la certificación internacional por parte de la embajada de Estados Unidos, y organismos internacionales que cuentan con las credenciales para ello.
González Flores expuso que los reos que fueron trasladados hoy en avión y autobú
s, son de los pocos que serán llevados a otras entidades, pues el resto serán reubicados hacia penales del mismo estado.
Aseveró que en este operativo nada fue al azar, pues el traslado de cada interno fue resultado de un trabajo de inteligencia estatal y federal para lograr la gobernanza en los centros penitenciarios, lo cual no se hubiera logrado sin el apoyo del gobierno federal y en concreto del presidente Andrés Manuel López Obrador , pues desde que inició la nueva administración federal ya casi están llegando a los dos mil internos trasladados.
Explicó que con estos traslados, habrá los penales de la entidad una población penitenciaria de seis mil 200 internos, mientras la capacidad es para casi once mil reos, y en el penal del Topo Chico hay dos mil 400 que serán reubicados en los de Apodaca y Cadereyta, durante el próximo mes de septiembre.
El pasado 27 de marzo en un operativo que implicó la participación de más de mil efectivos del Ejército, la Policía Militar, Policía Federal, y Fuerza Civil de Nuevo León, entre protestas de internos y sus familiares, fueron trasladados 512 internos del estado hacia penales de Coahuila y Morelos.
En total, fueron llevados 472 presos de los penales varoniles del Topo Chico, Apodaca y Cadereyta hacia Centro Federal de Readaptación Social de La Mesilla, en Ramos Arizpe, Coahuila, y 40 internas del Centro Único para Mujeres (CUM), fueron trasladadas al Centro Federal de Readaptación Social Femenil número 16 de Coatlán, Morelos.
afcl
