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Xalapa.— Un total de 18 denuncias penales por presuntos desvíos de recursos públicos enfrenta el exgobernador de Veracruz, el panista Miguel Ángel Yunes Linares y sus colaboradores, quienes ejercieron el poder durante el bienio de 2017-2018.
Las auditorías practicadas por el Órgano de Fiscalización Superior (Orfis) detectaron un presunto daño patrimonial de casi mil 400 millones de pesos, por lo cual el organismo autónomo procedió penalmente.
Se tratan de 17 denuncias por irregularidades en el ejercicio fiscal 2017 en los que se encontró un presunto desvío de recursos por 328 millones de pesos, y una de 2018 por mil 44 millones por supuesto daño patrimonial al erario público.
De acuerdo con documentos oficiales, las querellas fueron presentadas ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de la Fiscalía General del Estado y en la Fiscalía Nacional Anticorrupción de la Fiscalía General de la República.
En el contenido de las investigaciones se establece que, por ejemplo, se pagaron montos al margen de la ley por supervisión de proyectos, se rebasaron porcentajes permitidos en la contratación de obras y se adjudicaron contratos en desapego a la normatividad.
Los auditores detectaron, entre otras irregularidades, que en los servicios de Salud de Veracruz los funcionarios yunistas cometieron un presunto desvío de recursos por 71 millones de pesos al adjudicar tres contratos fuera de la normatividad.