Funcionarios del Programa Crédito Ganadero a la Palabra están lucrando con las necesidades de los ganaderos oaxaqueños , porque entregando cabezas de ganado "de desecho" que en el mercado valen entre ocho mil y 10 mil pesos, pero con un sobreprecio de hasta 16 mil pesos , denunció el presidente de la Unión Ganadera Regional del Istmo ( Ugrit ), Jorge López Guerra .
El pasado viernes, recordó el ganadero Honorio Rivera Barragán , funcionarios del Programa Crédito Ganadero a la Palabra, acudieron a Matías Romero, en la zona norte del Istmo de Tehuantepec y entregaron unas 200 novillonas a 50 ganaderos; sin embargo, dijo, el espíritu de ese programa no se está cumpliendo porque son bovinos de desecho con destino al sacrificio, no para criar y producir.
De acuerdo con el presupuesto aprobado por los diputados, el referido programa cuenta con cuatro mil millones de pesos y contempla la entrega de un millón de vaquillonas y 50 mil sementales para los ganaderos de 13 entidades del país , entre ellas Oaxaca. En la entidad oaxaqueña la primera entrega fue a finales de junio, donde los ganaderos mostraron su molestia porque las supuestas novillonas eran vacas con hasta cuatro partos.
"En esta semana iremos a la Ciudad de México para denunciar ante el Coordinador Nacional de Ganadería , David Monreal , que en Oaxaca los funcionarios de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural ( Sader ) y de los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura ( Fira ), están haciendo negocios con los coyotes o intermediarios al comprar ganado de desecho en los centros de acopio", dijo el presidente de la Ugrit.
"En esos centros de acopio de Veracruz o de Chiapas, los funcionarios del Programa Crédito Ganadero a la Palabra compran becerritas de ocho mil pesos y vacas de desecho de 10 mil pesos y se las están entregando a los ganaderos a precio de 16 mil pesos. No se vale que lucren con las necesidades de los ganaderos", dijo.
Es el mismo caso, explicó López Guerra, de los sementales, que en los centros de acopio se venden a 20 mil pesos y a los ganaderos beneficiarios del programa se los están vendiendo a 37 mil pesos . "Hay un gran negocio y hay corrupción y por eso iremos a la Ciudad de México", señaló Jorge López Guerra, quien señaló que en la aplicación del mencionado programa hay otras irregularidades.
Entre ellas destacó que no están entregando novillonas de 14 a 36 meses de edad, sino más pequeñas o más grandes y no están cumpliendo con un peso promedio por bovino de 300 a 350 kilos, sino de 200 kilos . "Así ningún ganadero podrá pagar a tiempo el crédito en especie, porque o la becerrita o vaca de desecho tardará más de años en lograr su periodo de gestación".
Además, acusó el presidente de los ganaderos, en la entrega de bovinos el pasado viernes en Matías Romero, se percataron que los animales no traían el arete que indica la procedencia y tampoco se presentaron los dictámenes que aseguren que están libres de brucelosis y tuberculosis. El Istmo, recordó López Guerra, fue declara zona limpia de enfermedades en octubre de 2017 y el programa, bajo esas condiciones, pone en riesgo la salud animal y de los consumidores.
El programa Crédito Ganadero a la Palabra establece en sus reglas de operación que cada beneficiario podrá recibir hasta 10 novillonas cargadas y un semental ; las vacas que están entregando no están cargadas, acusaron los ganaderos y la mayoría de los beneficiarios sólo están recibiendo entre dos y cuatro bovinos que de inmediato tratan de vender porque no sirven para la crianza.
En la misma zona norte del Istmo, en el poblado Palomares, que pertenece a Matías Romero, seis ganaderos de un total de 67 socios que tiene la Asociación Ganadera del Istmo Norte de Oaxaca , ya recibieron su folio y notificación que fueron beneficiados con el programa Crédito Ganadero a la Palabra, informó su dirigente Simitrio Antonio Antonio .
Sin embargo, adelantó que los seis beneficiarios ya acordaron que no van a recibir las vacas si tienen las mismas características que entregaron en la región de Tuxtepec , a fines de junio de este año, y en Matías Romero, el pasado viernes.
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