La fuga de gas cloro (amoniaco) de un viejo cilindro en un taller de herrería de la colonia Francisco Villa, en Culiacán dejó un saldo de dos personas muerta y veintinueve intoxicados, entre ellos, 5 menores de edad, un bombero, dos paramédico y un policía de la Estatal Preventiva.
Los elementos de la Policía Estatal Preventiva que intervinieron en el desalojo de los vecinos de la calle Zihuatanejo y de tres calles a la redonda, donde se registró el accidente, fueron desinfectados con agua a presión para eliminar de sus uniformes y cuerpos cualquier residuo de amoniaco de alta peligrosidad para el organismo.
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Cristóbal Castañeda, secretario de seguridad Pública del estado de Sinaloa, informó en redes sociales que la fuga de amoniaco, registrada la tarde del martes en las inmediaciones de un supermercado, provocó que 29 personas resultaran intoxicadas, entre ellas un Policía Estatal.
El secretario de Seguridad Pública del Estado alertó a las personas que estuvieron cerca del siniestro para que se bañen y se cambien de ropa, puesto que esta sustancia tóxica puede ser absorbida por la piel y dadas las condiciones climáticas los gases se mantienen más tiempo en el ambiente.
Subrayó que es necesario que laven sus prendas de vestir y las dejen afuera de los espacios donde duermen y en caso de presentar algún síntoma de intoxicación acudir de forma inmediata con un médico.
Dio a conocer que, por cuestiones de seguridad, fue necesario sacar de sus hogares a las familias de tres calles cercanas al taller donde tuvo lugar la fuga de gas cloro, dado que esta sustancia tóxica se dispersó rápidamente por la zona.
Castañeda Camarillo informó que al controlar los bomberos la fuga del gas cloro y sellar el viejo cilindro, se acompañó a los elementos de los cuerpos de auxilio, en una supervisión a las personas que acudieron a un centro comercial cercano al lugar, para verificar si no se habían presentado problemas.
Solo algunas personas, esgrimieron sentir leves síntomas de intoxicación por lo que fueron revisadas por los paramédicos, sin presentarse mayores incidentes, a las 29 personas que tuvieron que ser hospitalizadas por signos de intoxicación.
Comentó que compete a las autoridades de la Secretaría de Salud dar a conocer la evolución de los pacientes internados en hospitales que se vieron expuestos al gas cloro que se fugó de un viejo cilindro.
El amoníaco es un gas incoloro con un olor característico compuesto por un átomo de nitrógeno y 3 de hidrógeno (NH3), tiene un olor penetrante muy distintivo, que se describe como similar al sudor o la orina de gato.
La mayoría de las personas están familiarizadas con su olor debido al uso que tiene en detergentes y en productos de limpieza.
El amoníaco se disuelve fácilmente en agua.
La exposición a niveles altos de amoníaco presente en el aire puede causar irritación en la piel, los ojos, la garganta y los pulmones, e incluso provocar tos y quemaduras. La exposición a niveles muy altos puede producir la muerte.
El amoníaco es una sustancia corrosiva y los efectos principales de la exposición al amoníaco ocurren en el sitio de contacto directo (por ejemplo, la piel, los ojos, la boca, y los sistemas respiratorio y digestivo).
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