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Hermosillo.— Danna Paola nació el 17 de marzo de 2007, es hija de Marisol Montaño y Francisco Villarreal; sólo tenía dos años y tres meses cuando se convirtió en la víctima más pequeña del incendio en la Guardería ABC. Hoy ya tiene 15 años y es el orgullo de su familia, la cual, pese al dolor de lo ocurrido, ha sabido reponerse y acompañarla.
Por la manera en la que se aferró a la vida y por cómo enfrenta la adversidad y avanza con firmeza a pesar de las circunstancias, Danna Paola es un ejemplo de supervivencia y su principal admiradora es su propia madre.
“Les contaré una bella historia. Un día como hoy nació una niña con unos ojazos grandes, hermosos, con unas pestañas largas, pesando 3.800 kilogramos, midiendo 52 centímetros (…) A sus 2 añitos, como todos saben, emprendió una lucha, ha sido muy fuerte, valiente”, expresó la señora Montaño en un mensaje a través de sus redes sociales por los 15 años de Danna, que celebraron con una ceremonia religiosa en Villa Cantabria, Hermosillo.
“[Danna] nunca me dijo ‘no quiero o no puedo’, porque esas palabras para ella no existen. Creo que hemos hecho un magnífico equipo entre su papá, hermano, mis papás, sus terapeutas, doctores y las personas más cercanas (…) Nunca te canses, sigue siempre puro pa’lante”, escribió para su hija.
Más que esperanza
A Danna Paola el incendio de la Guardería ABC le dejó lesiones con repercusiones de por vida. Fue una de las víctimas del siniestro de la estancia infantil, ocurrido en junio de 2009, donde estaban 176 bebés y 50 adultos, de los cuales, 49 menores murieron y 106 personas resultaron con heridas, entre ellas 24 pequeños, quienes sufrieron quemaduras de segundo y tercer grado hasta en 80% de sus cuerpos.
En el caso de Danna Paola, resultó con quemaduras en 47% de su cuerpo, la amputación de nueve dedos y la inhalación de tóxicos le provocó daños visibles en la piel, cuero cabelludo y una lesión en 40% de su cerebro.
A causa de las quemaduras no pudo caminar por más de dos años. Vivió operación tras operación: le extrajeron piel para injertos y rehabilitación de tejido.
Hoy, las afectaciones cerebrales le provocan movimientos involuntarios o reflejos que a veces la hacen tropezar o caer.
De manera inicial, el panorama era desfavorable, pues los médicos dijeron a sus padres que no podría caminar ni hablar, pero con constancia en la rehabilitación, se ha convertido en la luz, en el gran orgullo de sus padres y de sus seres queridos.
“Gracias, Dios; gracias, vida. Se llegó el día más esperado mi reyna (sic), ya sus XV. Un día mágico y magnífico”, compartió Marisol Montaño junto con fotografías y videos de la celebración, en las que Danna Paola lucía feliz.
En su mensaje, Marisol agradeció también a los suyos “por estar presentes en este día tan lleno de diferentes emociones y también de lágrimas, pero de felicidad, de agradecimiento a mi Dios y a mi Virgencita por permitirnos estar en una de las etapas más bonitas de nuestra princesa”.
