Guadalajara.— La mañana de ayer falleció Guillermo Cosío Vidaurri, quien gobernó Jalisco del 1 de marzo de 1989 al 30 de abril de 1992, cuando renunció al cargo por la tragedia de las explosiones del 22 de abril en Guadalajara, cuyo saldo oficial fue de 212 fallecidos, 69 desaparecidos y más de mil 800 lesionados.
El exmandatario, quien tenía 90 años, murió después de la siete de la mañana debido a complicaciones respiratorias causadas por una neumonía que contrajo hace unas semanas tras padecer dengue.
Los familiares del político consideraron que si bien el deceso se debió a un paro respiratorio ocasionado por la neumonía, ésta apareció debido a las secuelas provocadas por el dengue.
Político priísta, Cosío Vidaurri fue alcalde de Guadalajara (1971-1973), diputado federal (1976-1979), secretario general del CEN del PRI (1981), director del Metro de la Ciudad de México (1982-1983) y secretario general de gobierno del DF (1983-1988).
Tras su renuncia como gobernador fue sucedido por Carlos Rivera Aceves y al terminar ese sexenio el PRI en Jalisco perdió por primera vez la gubernatura ante el PAN.
Se espera que este jueves se le rinda una serie de homenajes en diferentes sedes, entre ellas, en el Palacio de Gobierno de Jalisco, en el Congreso del estado y en el ayuntamiento tapatío, pero además al mediodía el Colegio de Notarios de Jalisco le hará un homenaje póstumo y luego en las instalaciones del PRI estatal.