La familia García se dedicó el domingo a barrer todos los cristales de su casa, los que estaban en las ventanas, las puertas, los cuadros. Todos quedaron rotos tras la explosión que se registró la madrugada de este domingo en San Pablo Xochimehuacan, Puebla , provocada por una fuga en una toma clandestina.
No quedó uno solo vidrio completo
, los trozos quedaron esparcidos por el patio, la sala, las recámaras.
Fernando García Morales cuenta a EL UNIVERSAL que poco antes de las dos de la madrugada les avisaron que debían desalojar y en ese momento salieron los cinco miembros de su familia.
“Nos avisaron los vecinos que había una fuga de gas, pensamos que era la gasera, no nos imaginamos que fuera una fuga clandestina”, dijo.
La evacuación a tiempo les permitió estar a salvo en el momento en que se produjeron las explosiones, que su familia calcula que fueron cuatro.
Señaló que los principales daños que presenta su casa fueron las ventanas, ventanales, puertas, la puerta principal, los cuadros e, incluso, el tinaco del agua se rompió, “y eso es por fuera, no hemos revisado bien por dentro”, reconoció Fernando.
Indicó que regresaron alrededor de las 4 de la mañana “porque nos avisaron que se estaban metiendo a robar. Tuvimos que venir a cerrar las puertas”.
Una persona fallecida, al menos siete heridos y la evacuación de cientos de familias dejó una explosión y posterior incendio en una toma clandestina de un ducto de gas de la empresa gubernamental Petróleos Mexicanos (Pemex) en una junta auxiliar del municipio de Puebla, capital del estado.
La fuerte conflagración ocurrida la madrugada de este domingo, generó zozobra y pánico entre pobladores de la Junta Auxiliar de San Pablo Xochimehuacan y habitantes de diversas colonias de la periferia de la capital, quienes por propio pie abandonaron la zona. La situación fue controlada cerca de dos horas después.
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