Cuernavaca.— Frente a la tumba del regidor del PAN, Alfredo Geovanni Lezama Berrera, su padre, el exdiputado local Gustavo Lezama, rompió con el silencio de los dolientes y lanzó: “Mataron a un hombre que buscaba justicia, seguridad para su pueblo, Cuautla”.
“Este atentado no debe quedar impune, se debe llegar hasta las últimas consecuencias”, demandó. Enseguida describió la situación de inseguridad en Cuautla, municipio de la zona oriente del estado, gobernado por Morena. “El 80% de los negocios cerraron porque les piden derecho de piso, hay secuestros, asesinatos”, dijo.
Instó a la ciudadanía a luchar para poder combatir todo tipo de inseguridad, que ya rebasó a las autoridades.
Juana Barrera, actual secretaria general del PAN en Morelos y madre del regidor, contó que Geovanni tenía la convicción de trabajar por la sociedad y siempre se negó a abandonar el territorio cuautlense.
“Yo le dije: ‘Vámonos de Cuautla’ y me respondió ‘no, yo quiero que cambie Cuautla, y aquí nos quedamos’, y así sucedió. Nunca quiso abandonar este municipio, aunque él nació en Cuernavaca.
“Allá está registrado, pero nos vinimos a vivir a Cuautla y nos quedamos porque nos gustó”, contó la maestra.
Geovanni Lezama fue asesinado la tarde del jueves por un hombre que irrumpió en el gimnasio donde se ejercitaba. Testigos comentaron a la policía de Morelos que fueron entre cuatro y cinco disparos de arma de fuego.