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Irapuato.— Decenas de personas marcharon ayer en Irapuato para exigir justicia por el secuestro y homicidio del empresario Jair Martínez y todas los personas desaparecidas.
En la movilización, encabezada por familiares de Jair Martínez, exigieron la renuncia del fiscal general del estado, Carlos Zamarripa Aguirre, y la pena de muerte para los secuestradores.
Los padres de Jair señalaron que la fiscalía no actuó cuando su hijo estaba vivo, aunque les proporcionaron las pruebas del lugar donde lo tenían secuestrado.
“La fiscalía de Irapuato no supo hacer su trabajo. Nosotros les dimos las pruebas. ¿Qué buscaban?, ¿qué cateáramos la casa? No nos hicieron caso”, denunció su madre.
Jair fue secuestrado el 12 de marzo por un grupo armado; ocho horas después sus padres dieron a la fiscalía la ubicación del celular de su hijo. Las autoridades se presentaron hasta la noche del lunes y lo encontraron sin vida.
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