Zacatecas.— “¡Queremos vivir sin miedo! Jerez quiere paz”, se leía en una gran manta que portó un grupo de ciudadanos y familiares de personas desaparecidas que se manifestaron en ese municipio, a la par que se realizaba el funeral del joven químico Luis Alberto Espinoza, quien fue encontrado muerto después de cinco días que ser privado de la libertad por un grupo armado.
En lo que va de este año, de acuerdo con las cifras del Registro Nacional de la Comisión Nacional de Búsqueda, del 1 de enero al 12 de diciembre en Zacatecas se han reportado 618 personas desaparecidas y no localizadas. Jerez ocupa el tercer lugar de los municipios con mayor incidencia, con 52 casos.
El químico farmacobiólogo, de 28 años, fue interceptado por un grupo armado el pasado sábado, cuando se dirigía a su trabajo en un laboratorio ubicado en la capital del estado.
La familia se movilizó en redes sociales y, justo el jueves, cuando se habían cumplido cinco días de la desaparición, decidieron realizar bloqueos carreteros. Ese día se confirmó el hallazgo del cuerpo del joven en el municipio de Villanueva.
Ante la noticia, el ayuntamiento de Jerez declaró luto y suspendió las actividades del festival navideño hasta nuevo aviso.
En medio de la indignación, un grupo de ciudadanos y familiares de personas desaparecidas se movilizaron este viernes en ese municipio exigiendo paz, así como la búsqueda y localización de sus seres queridos.
La marcha llegó hasta la presidencia municipal, donde exigieron que los atendiera el alcalde Rodrigo Ureño, quien anunció que solicitaría a la Guardia Nacional mayor presencia de elementos, además de que se van a implementar brigadas de búsqueda y se les dará acompañamiento para seguir presionando a los Ministerios Públicos que llevan las investigaciones de las desapariciones.
Los manifestantes anunciaron que este sábado realizarán una marcha en la capital de Zacatecas y también propusieron trasladarse a la Ciudad de México para llevar los casos hasta el gobierno federal.