Taxco
Justicia, es la única exigencia María de los Ángeles Romero Mazón, madre de Magdalena Aguilar Romero, la joven nutrióloga que fue encontrada desmembrada el lunes pasado en Taxco, Guerrero. La madre de Magdalena sólo espera que el crimen de su hija no quede impune como muchos casos de feminicidios que han ocurrido en Guerrero en los últimos años.
En 2017, en Guerrero fueron asesinadas 219 mujeres, de estos crímenes sólo 13 la Fiscalía General de Estado (FGE) clasificó como feminicidios, el resto los consideró como homicidios dolosos.
En los primeros 25 días de 2018, en Guerrero fueron asesinadas 22 mujeres, casi una al día en promedio. El último crimen fue precisamente el de Magdalena.
El año pasado, la Secretaría de Gobernación (Segob) declaró la alerta de género en ocho municipios de Guerrero: Acapulco, Iguala, Tlapa, Ometepec, Chilpancingo, Ayutla, Zihuatanejo y Coyuca de Catalán.
La madre de la joven nutrióloga exigió que la fiscalía realice una investigación profunda para dar con todos culpables del crimen de su hija.
María de los Ángeles está segura de que en el asesinato de su hija no actuó solo César Gómez Arciniega, el ex esposo de Magdalena, sino tuvo más cómplices.
La tarde del miércoles, el fiscal general del estado, Xavier Olea Peláez, informó de la detención de la madre de César Gómez, la señora Silvia “N”, como copartícipe de asesinato de Magdalena. La detención ocurrió en Taxco, después de que un juez liberó la orden de aprehensión contra la ex suegra de Magdalena.
La FGE también ofreció una recompensa de 500 mil pesos por información que lleve a la detención de César Gómez, el principal sospechoso del feminicidio y quien aún se encuentra prófugo.
María de los Ángeles además de exigir justicia, tiene miedo por su seguridad, la de su familia, amigos y de todos los que la han apoyado desde que comenzaron a exigir la presentación de Magdalena y ahora justicia por su asesinato.
Desde que comenzaron a buscar a Magdalena, toda la familia dejó su casa para resguardarse en otro sitio.
María de los Ángeles no encuentra un motivo del homicidio de su hija, no le cabe en la cabeza que ya no está y la saña con la que la asesinaron. Sin embargo, advierte que no descansará hasta que haya justicia por el asesinato de Magdalena.
Nuevo informe
La Fiscalía General del Estado difundió un nuevo informe sobre el crimen, en el que señala que el domingo 14 de enero, los familiares de Magdalena se presentaron en el domicilio de César Gómez para preguntar por la joven.
Éste y su madre, Silvia “N”, aceptaron que Magdalena había estado ahí la noche anterior, y les dijeron que se fue como a las 6 de la tarde sin llevarse a los niños, que precisamente fue el objetivo de la presencia de la joven en el domicilio de su ex pareja.
Sin embargo, asegura la FGE, los familiares de Magdalena vieron a César Gómez con rasguños en la cara.
Después la familia pidió la intervención de la Policía Ministerial para que revisara el lugar y se percataran si estaba ahí Magdalena. Así sucedió; sin embargo, no la encontraron.
No obstante, el cuerpo de la mujer fue encontrado el lunes alrededor de las 11:15 de la mañana en un local que es propiedad de César Gómez.
El cuerpo estaba desmembrado, congelado dentro de un refrigerador y en cacerolas.
De acuerdo con la FGE, Magdalena murió por asfixia por ahorcamiento y después fue desmembrada. El informe también indica que de acuerdo con exámenes de química forense, se determinó que el asesinato ocurrió en el callejón Platero número 8, en el barrio Guadalupe, el domicilio del ex esposo de Magdalena.
La mañana del 13 de enero, Magdalena salió de su casa a dar una consulta al Centro de Salud donde trabajaba. Posteriormente, alrededor de las 5:30 de la tarde, tuvo contacto con su madre, María de los Ángeles, a quien le dijo que iría a recoger a sus hijos, quienes se encontraban con su padre, César Gómez. En esa llamada acordaron verse en una iglesia para asistir a una misa de cada de año de otro familiar. Magdalena no llegó.
El gobernador del estado, Héctor Astudillo Flores reconoció la situación de vulnerabilidad de las mujeres guerrerenses ante la violencia e instruyó el diseño y la implementación de un programa de atención a la Declaratoria de Alerta de Violencia de Género, en ocho municipios.