Roberto Romero
, ex secretario de Gobierno en el sexenio de Guillermo Padrés (2009-2015), se reservó el derecho a rendir su declaración ante un juzgado de Hermosillo, donde se presentó con la protección de un amparo para evitar ser detenido por las acusaciones de ejercicio abusivo de funciones y tráfico de influencias.
La Fiscalía Anticorrupción de Sonora deberá aportar las pruebas necesarias para solicitar la prisión preventiva en contra de Roberto Romero, dijo el fiscal adjunto de esta procuraduría, Francisco Vargas Díaz.
El ex funcionario fue extraditado el 1 de febrero por autoridades de Estados Unidos y trasladado al Centro de Readaptación Social (Cereso) Número 1 de Hermosillo, para ser liberado horas después por efecto de uno de los amparos que le otorgó un juez federal.
Este martes 6 de enero, a las 10:00 horas, acudió en compañía de su abogado al Juzgado Sexto de lo Penal para atender una diligencia judicial, sobre la cual se reservó el derecho a declarar.
Posteriormente, el ex funcionario abandonó el reclusorio y declinó hacer cualquier comentario de carácter público, “no tengo comentarios es un asunto de carácter jurídico”, expuso.
De acuerdo a la Fiscalía Anticorrupción de Sonora (FAS), Romero López es responsable de la comisión del delito de tráfico de influencias en favor de una empresa de la que era socio mayoritario y Presidente del Consejo de Administración, al usar recursos de la Sagarpa en Sonora para su beneficio.
La Sagarpa demandó a Roberto Romero López y su esposa, la ex diputada panista Mónica Robles Manzanedo, por daño patrimonial a 70 familias del ejido La Victoria, al construir una barrera artificial para bloquear y desviar el río San Miguel a fin de proteger el rancho de su propiedad, lo que en una abundante lluvia inundó las viviendas de los ejidatarios.
El matrimonio es investigado por presuntos actos de tráfico de influencias con la Sagarpa estatal en beneficio del rancho familiar "Temporal de Pascual Díaz", ubicado en la zona rural de Hermosillo, Sonora.
Al momento se conoce que Romero cuenta con cuatro amparos en contra de la justicia y su esposa Mónica tiene dos. Los delitos por los que son señalados no son graves, por lo que pueden llevar el proceso en libertad.
afcl