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A tres semanas de la inundación de los pozos de carbón de El Pinabete, donde quedaron atrapados 10 mineros el pasado 3 de agosto, el gobierno federal analiza la estrategia que emprenderá para el rescate.
Una vez que se cuenta con los resultados de los estudios geofísicos realizados, se estudian tres posibilidades.
La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, informó que el equipo de técnicos propone hacer un tajo abierto con obras de rampas de acceso inclinado.
“Esto lo que significa es una entrada a la mina desde la superficie, para bajar por un túnel con una pendiente hasta las galerías, y por supuesto, acompañado con el bombeo”, explicó.
La segunda opción es realizar “pantallas de control”, que es una barrera física entre las minas de Conchas Norte y de El Pinabete, y simultáneamente bombear.
La tercera alternativa es que pueda contener ambas combinaciones, con el tajo y la pantalla de control, destacó la funcionaria.
“La Comisión Federal de Electricidad y el equipo técnico de ingenieros de Mimosa van a proponer soluciones técnicas para el ingreso a la mina, posteriormente se va a evaluar y determinar la mejor en función del tiempo y el riesgo de ingreso”, detalló.
En tanto, anoche se dio a conocer que la Fiscalía General de la República (FGR) colocó sellos de aseguramiento en las oficinas de la empresa Minera El Pinabete, supuesta concesionaria de los pozos accidentados.
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