Luego de que la semana pasada el nuevo gobierno de Baja California, encabezado por Jaime Bonilla Valdez (Morena), revelara el hallazgo de su propia “estafa maestra”, es decir, un presunto desvío de recursos por hasta mil 200 millones de pesos durante la administración del exgobernador Francisco Vega (PAN), nos comentan que el tema ya sufrió descalabros. Esto, nos dicen, debido a que una de las 90 empresas calificadas como fantasma y con las que el gobierno de don Francisco firmó supuestos contratos irregulares, dedicada a servicios digitales, salió a recular al equipo de don Jaime, alegando que su compañía sí existe y que no incurrió en un delito, pues incluso la empresa es conocida por haber colaborado con autoridades de Estados Unidos, donde ganó una licitación. ¿A quién se le habrá pasado verificar tal información?
Nos cuentan que en la frontera de Chiapas el Estado laico ya no existe, ya que el alcalde de Frontera Comalapa, Óscar Armando Ramírez (Morena), se ha dedicado a promover la presentación de cantantes cristianos en su municipio, incluso realizando invitaciones abiertas a los eventos desde las redes sociales del ayuntamiento. Como si fuera un promotor de los artistas cristianos, nos platican, recientemente Ramírez Aguilar se dedicó a invitar a sus gobernados para que asistieran al concierto de Marcela Gándara y Joseph Cabanilla, así como darles la bienvenida al momento de su arribo a esa localidad. El tema, nos mencionan, ha generado controversia, ya que con bombo y platillo don Armando presumió que el evento fue gratuito, cortesía del ayuntamiento y “una noche de gran bendición” para su tierra. Así, nos señalan, es como en el sur las creencias se mezclan con las actividades del ayuntamiento. Amén.
Aprovechándose del nuevo Sistema de Justicia Penal, nos platican que al exdiputado local de San Luis Potosí Mariano “N” le llegó el arrepentimiento y pidió al juez regresar 86 mil 499 pesos —más intereses—, para poder desahogar una de las cinco denuncias que existen en su contra. Don Mariano, según nos explican, fue denunciado cinco veces por ciudadanos, quienes lo acusaron de falsificar sus firmas y cobrar cantidades de dinero que estaban destinadas a personas de escasos recursos, a través de empresas fantasma. En el caso específico, nos dicen, los 86 mil pesos corresponden a una demanda que le llegó desde el municipio de Ébano, donde supuestamente entregó un apoyo por más de 80 mil pesos a una persona... que ya había fallecido. ¡Qué listo nos salió!
En Morelos, nos comparten, va ganando el consenso de reconstruir la estrategia para detener el número de feminicidios, pero también avanzan las voces que piden cambiar a la titular del Instituto de la Mujer estatal, Desiré León Hernández. A la aludida, nos dicen, personajes políticos y colectivos feministas le reclaman que su experiencia como activista le esté sirviendo poco en el cargo, pues a la fecha no se ven acciones potentes para abonar a las políticas de prevención de la violencia contra las mujeres, al grado de que ha sido omisa frente a los lineamientos de la Alerta de Violencia de Género que tienen ocho de los 36 municipios morelenses. Los más críticos, nos indican, la han tundido con que “no es lo mismo ser borracho, que cantinero”.