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Ciudad Victoria.— En la reunión celebrada entre autoridades estatales y federales para atender el fenómeno migratorio, se destacó que Tamaulipas no será una entidad receptora de migrantes y que los albergues que implemente el gobierno federal se ubicarán fuera del estado.
Entre otros acuerdos, se informó, las autoridades estatales colaborarán con la realización de campañas de denuncia ciudadana y para la acreditación de identidad, así como en facilitar la relación de Casas de Atención al Migrante que operan en Tamaulipas y mantener comunicación permanente con el INM.
En el encuentro, realizado en el Palacio de Gobierno del estado, se designó al general de división diplomado de Estado Mayor, Pedro Lohmann Iturburu, como coordinador del Programa de Migración en la entidad.
Además, se dio a conocer, el gobierno federal intercambiará con la administración local información de inteligencia, estadísticas y garantizará la movilidad para la repatriación de mexicanos y extranjeros.
En representación del gobierno de México estuvieron el comisionado nacional del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño, y el director general de Asuntos Especiales de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Julio César Sánchez.
Por parte del gobierno estatal asistió el secretario general de Gobierno, César Verástegui, y el jefe de la Oficina del gobernador, Víctor Manuel Sáenz.
Ante la posibilidad de que Nuevo Laredo, Tamaulipas, fuera incluida en el listado de ciudades mexicanas donde los migrantes esperan su proceso de asilo, la organización Médicos Sin Fronteras se pronunció en contra, al considerar que los migrantes podrían caer en manos del crimen organizado.
Los testimonios recogidos por MSF revelan que las organizaciones criminales identifican a los migrantes en cuanto llegan a Nuevo Laredo, los capturan en terminales de autobuses y los llevan a “casas de seguridad donde son retenidos para ser extorsionados, golpeados o violados”.
