Hermosillo.— Una caravana de vehículos con hombres armados sembró el terror en las colonias Centro Ejidal de Agua Prieta, durante la madrugada de ayer, con un saldo oficial de dos muertos, un herido, dos viviendas baleadas y cinco rafagueados e incendiados.
Habitantes de este municipio, que hace frontera con Douglas, Arizona, Estados Unidos, registraron en redes sociales los momentos de terror que vivieron por los estruendos de las ráfagas de las armas de fuego.
“Tierra de nadie, malandros patrullan las calles”, “Amanece Agua Prieta con tercer día de balaceras”, “Código Rojo en Agua Prieta”, “Nos dormimos en Agua Prieta y nos despertamos en Culiacán”, “Al estilo Culiacán”, “Amanece Agua Prieta con otro parecido culiacanazo”, se lee en algunas publicaciones.
La mañana del lunes todo era confusión, los residentes de la ciudad tenían miedo de salir a las calles, todo lucía desierto. Los padres no llevaron a sus hijos a las escuelas.
El alcalde de Agua Prieta, Jesús Alfonso Montaño Durazo, a través de una publicación en Facebook dijo que se mantuvo “al pendiente y en constante coordinación” por los hechos violentos de la madrugada.
“En estos momentos se patrulla la ciudad en un operativo conjunto y se encuentra en calma. Sin embargo, pudieran existir riesgos aun impredecibles”, advirtió.
“Considerando que las actividades se realicen de forma normal, se recomienda precaución y queda al criterio de los padres la actividad de cada familia y que sus hijos que asisten a la escuela”, publicó.
En Estados Unidos, las autoridades del condado de Cochise, Arizona, que comprende la ciudad de Douglas, emitió una alerta y aumentó los patrullajes por precaución.
El sheriff Dannels lanzó una advertencia para que los residentes de Douglas evitaran “viajes innecesarios a México en este momento”.
La Mesa de Seguridad para la Construcción de la Paz, a través de la Secretaría de Seguridad Pública local, determinó el reforzamiento de la seguridad en la región, con la participación de los tres niveles de gobierno, por lo que de inmediato se trasladaron a la región elementos del Ejército, la Guardia Nacional y la Policía Estatal.