Quien nuevamente fue noticia, pero de la mala, nos platican, fue el excandidato del PT al ayuntamiento de Ixmiquilpan, Hidalgo, Vicente Charrez, luego de que otra vez fue detenido, ahora en presunto estado de ebriedad mientras detonaba un arma de fuego. Los hechos ocurrieron, detallan, a unos metros de la comandancia, por lo que la policía llegó pronto. Pero eso no fue todo, nos explican que don Vicente intentó darse a la fuga y luego de una persecución fue detenido, sumando así al menos una segunda aprehensión en lo que va del año, la primera de ellas, en febrero pasado, cuando protagonizó un choque, también en estado etílico. No cabe duda que hay quienes ni a la mala entienden.

Monreal, una lavadita de manos

Nos cuentan desde Zacatecas que al parecer la violencia que azota a la entidad pone de malas al gobernador David Monreal (Morena), quien ya no busca quién se la hizo, sino quién se la pague y así lo demostró recién, cuando en una conferencia, antes de emitir cualquier dato sobre los avances de su estrategia de seguridad, prefirió acusar a los medios de comunicación de “ser promotores de las organizaciones criminales”, por hacer su trabajo e informar acerca de los asesinatos y terribles escenas de terror que los cárteles protagonizan a diario. No obstante, nos dicen, a don David le salió todo mal y ahora tiene encima a periodistas y protectores de los derechos humanos, quienes piden que se disculpe, pues por si no ha visto las noticias que tanto critica, el crimen le ha quitado la vida a comunicadores, mientras mantiene amenazados a otros.

De ventas, patrimonio y despojo

Nos narran que en La Paz, Baja California Sur, están en la mira el gobernador Víctor Castro Cosío (Morena), la alcaldesa Milena Quiroga (Morena) y hasta el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de que vecinos de la colonia El Conchalito se enteraron a través del Diario Oficial que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público busca subastar 2 mil metros de terrenos de un parque público por el que batallaron mucho para conseguirlo. En este sentido, señalan que la acción y el poco tacto político puso en alerta a los vecinos, pues no es la primera vez que son despojados de espacios públicos mediante argucias legales y, aunque ya alistan amparos, lo cierto es que hay quienes acusan que el “gobierno del pueblo” terminó siendo todo menos eso después de las elecciones de 2021.

Entre legislar o “robar”

La que de plano se voló la barda en el Congreso de Tamaulipas, nos platican, fue la diputada morenista Magaly Deandar, quien dejó de lado el trabajo legislativo y subió al estrado para “robarse” el micrófono y una carpeta con documentos de su compañera panista Imelda Sanmiguel. En ese sentido, nos dicen que aunque a la fecha nadie sabe con claridad qué había en dicha carpeta, y la morenista se limita a explicar que los legisladores panistas buscan dañar al estado, lo cierto es que detractores y hasta cercanos le han pedido a doña Magaly dejar de jugar y mejor ponerse a trabajar. ¡Auch!