La Coparmex en Baja California Sur, en voz de su presidente Miguel Ángel Ochoa , dijo lamentar el recrudecimiento de la violencia en la entidad, particularmente de este fin de semana, con el homicidio de Silvestre de La Toba Camacho , y consideró que se trata de duro golpe para las instituciones y para la sociedad.
Los hechos, dijo, alarman a todos los sectores, y en el caso del empresariado, demanda el esclarecimiento no sólo de éste sino los cientos de homicidios que se han registrado en la entidad en estos años de violencia.
“No queremos ya hablar de cuántos, no es competencia, pero nos preocupa en general toda esta ola de violencia y hasta los niveles que ha llegado. Pero sobre todo queremos saber qué es lo que está detrás de todo ello, no conocemos el resultado de las investigaciones, no sabemos si hay órdenes de aprehensión contra los ejecutores materiales, y tampoco sabemos dónde están los autores materiales”, expresó.
A su vez, Julio Castillo, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Los Cabos, condenó el asesinato y pidió que las autoridades federales y estatales actúen “a la altura de lo que este acto significa”.
“Es un hecho que lastima a la sociedad, y se debe aclarar, no solo conocer sobre los responsables sino sobre los motivos, y dejar muestras que las instituciones están muy por encima de cualquier actuación de la delincuencia organizada que se pueda presentar. Como sector empresarial, sabemos nuestro papel de acompañar y fortalecer a las instituciones, pero también de exigir resultados”, apuntó.
El empresario Victor Martínez de Escobar, presidente también de la organización Legalidad y Transparencia, se dijo asombrado de los hechos y consideró que en la sociedad sudcaliforniana existe temor de que “cualquiera pueda ser el objetivo”, que las pugnas criminales continúen dejando víctimas colaterales.
Además, consideró que esta ola de violencia agudizada envía un mensaje negativo sobre BCS al resto del país y del mundo.
“Nos afecta en todos los niveles. Nosotros mismos no queremos salir, nos da temor, porque ahora cualquiera puede ser el objetivo. ¿Qué pensarán los turistas, los visitantes? La gente tendrá miedo de estar en las calles", puntualizó.
afcl