Guanajuato. —La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) estableció una alerta en todos sus edificios, a nivel estatal, tras el atentado a la agencia del Ministerio Público para Adolescentes de Irapuato registrado el martes pasado y el ataque a policías ministeriales de Celaya.
El titular de la fiscalía, Carlos Zamarripa Aguirre, informó que hay “un alertamiento” en las oficinas del Ministerio Público, ante la represalia de grupos delincuenciales por las tareas que lleva a cabo la dependencia con motivo de la investigación y esclarecimiento de los casos.
Después de participar en la ceremonia del 185 Aniversario de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado (FSPE), explicó que en la medida tiene que ver con lo acontecido en días pasados, en Celaya hubo un atentado en contra de elementos de la Gendarmería Nacional, donde también resultaron lesionadas personas e integrantes de las fuerzas federales.
Zamarripa Aguirre dijo que el reforzamiento de la seguridad tiene que ser y será permanente. Calificó como cobarde la irrupción de varios hombres armados a las oficinas de la agencia del Ministerio Público para Menores de Irapuato, sitio en el que se realizan actividades administrativas, en donde no hay elementos armados.
Dijo que se tienen identificadas algunas de las personas que participaron en el ataque, en la que falleció una secretaria ministerial y resultaron lesionadas dos personas más: otra secretaria y un adolescente.
En el evento, el gobernador Miguel Márquez pasó lista a los integrantes de las FSPE, quienes sirven con honradez y lealtad; recordó con un homenaje a cuatro elementos caídos en el cumplimiento de su deber.
Los efectivos presentes guardaron un minuto de silencio y luego el gobernador ofreció un reconocimiento a familiares de los fallecidos: policía José Ricardo Mosqueda Cabrera, policía segundo Angélica Herrera Rodríguez, policía tercero Manuel Acosta García y el inspector J. Santos Juárez Rocha.
“Mi reconocimiento y aprecio a esta gran institución de la cual me siento orgulloso, institución que está presente, día a día, cuidando y velando por la seguridad de nuestros hijos, pero también reconocer a aquellos que dieron su vida por la paz y la tranquilidad de este estado.
“Elementos que murieron en el cumplimiento de su deber, como gente intachable, gente incorrupta que perdió la vida; actos que como sociedad y como gobernador tenemos que condenar”, acotó.