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A las 6:30 de la mañana salió una caravana de autos de la comunidad de Xalpitzahuac a la cabecera de municipio, Atlixtac, en La Montaña de Guerrero. El objetivo era llegar a una asamblea para elegir a los precandidatos a la presidencia municipal y a las diputaciones locales del PRD.
La caravana se quedó en el camino: un grupo armado los emboscó y murieron dos simpatizantes, un hombre y una mujer. Cuatro más quedaron heridos.
El reporte de la Policía Estatal indica que cuando la caravana pasaba por la comunidad de Chalma, también en el municipio de Atlixtac, fue atacada a tiros.
Al lugar llegaron integrantes de la Policía Comunitaria de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) a auxiliarlos. A los heridos los trasladaron al hospital de Tlapa, distante a una hora.
Por la tarde, el vocero del Grupo de Coordinación Guerrero (GCG), Roberto Álvarez Heredia, confirmó la emboscada y el asesinato de las dos personas y cuatro más heridas. Explicó que de acuerdo con el reporte de la Policía Municipal de Atlixtac, los simpatizantes del PRD viajaban en una camioneta Nissan roja, sin placas, que tenía logotipos de la Policía Comunitaria cuando fueron atacados.
Álvarez Heredia informó que la Fiscalía General del Estado (FGE) investiga el ataque, cuyos motivos se desconocen hasta el momento.
Atlixtac es de los municipios donde comienza La Montaña baja, colinda con Chilapa, donde los grupos delictivos Los Rojos y Los Ardillos libran una brutal disputa, que ha dejado cientos de muertes y desapariciones.
En Guerrero la mayoría de los partidos políticos están en su proceso interno de selección de candidatos. En Atlixtac, el presidente municipal Marcelino Ruiz Esteban pidió licencia al Congreso del estado para separarse del cargo, con el fin de reelegirse como edil.
El actual proceso electoral en Guerrero ya lo marcó la violencia. Han sido asesinados por lo menos tres precandidatos, uno de ellos alcalde en funciones.
El 28 de diciembre de 2017 asesinaron al edil de Petatlán, en la Costa Grande, el perredista Arturo Gómez Pérez. Según el reporte policiaco, un hombre esbozado le disparó en tres ocasiones cuando se encontraba en un convivio con compañeros de generación.
Arturo Gómez era puntero en las encuestas en la siguiente elección, donde ya había manifestado su intención de reelegirse.
La noche del 31 de diciembre, enfrente de su casa fue asesinado Adolfo Serna, en Atoyac, también en la Costa Grande. Según los priísta, era uno de los precandidatos más fuertes para convertirse en el abanderado del PRI a la alcaldía de Atoyac. El político era propietario de la empresa constructora Papanoa, la cual era una de las principales prestadoras de servicios del ayuntamiento de Atoyac.
En noviembre de 2017, en Quechultenango asesinaron a tiros al ex candidato a la alcaldía de ese lugar, Arturo Solano, quien también había manifestado su intención de competir nuevamente por la presidencia municipal.
En 2017, por lo menos 15 perredistas fueron asesinatos, entre ellos un munícipe, ex alcaldes, ex diputados locales y el secretario general del PRD en Guerrero.