La Secretaría de Economía del gobierno federal reporta que en el año 2021, el sector minero en México registró un aumento de 16% de la inversión recibida en comparación con el año 2020, ascendiendo a 4 mil 246 millones de dólares, situación que confirma que este sector “continúa manteniéndose como una de las ramas productivas que atrae mayor inversión al país”.
Así lo dio a conocer la dependencia federal a través de su página web, en donde también señala que, de acuerdo con “la encuesta anual del Instituto Fraser, México se ubicó en 2021 en el sexto sitio como destino de inversión en América Latina , y en el sitio 34 a nivel mundial del Índice de Atracción de Inversión”.
En consonancia con estos datos, el Inegi registra que, en el año 2021, la minería aportó 3.06% al PIB Nacional y el 9.62% al PIB Industrial. Estos datos confirman que aumentó la aportación del sector minero en estos rubros, al contrastar que en el año 2020 la aportación de este sector al PIB Nacional fue de 2.3% y en el PIB Industrial de 8.3%.
Siguiendo la información que proporciona la Secretaría de Economía en su página web, se informa que el valor “de la producción minero-metalúrgica en México pasó de 281 mil 515.9 millones de pesos en 2020 a 338 mil 187.7 millones de pesos en 2021, lo que representó un aumento de 56 mil 671.8 millones de pesos”.
También confirma que México además de “ser el principal productor de plata a nivel global por más de 10 años consecutivos, México se ubica entre las primeras 10 posiciones en la producción mundial de 17 minerales, incluyendo el segundo en fluorita, tercero en celestita y wollastonita, sexto en zinc, séptimo en sal, octavo en cobre y noveno en oro”.
Lo anterior demuestra el importante papel que juega la minería en el crecimiento económico de México.
En cuanto al desarrollo social, la Cámara Minera de México (Camimex) reporta que en el año 2020 sus asociados aportaron 5 mil 570 millones de pesos para concretar acciones y programas de desarrollo social y medioambiente, beneficiando directamente a 212 municipios en 24 estados de la República en donde realizan sus actividades mineras.
En este marco, la Camimex informa que 29 unidades mineras participan en el programa de industria limpia de la Profepa, tres empresas mineras se distinguieron en Exce- lencia Ambiental, y tres grupos mineros forman parte del Índice Verde de la Bolsa Mexicana de Valores.
En la actualización del 8 de julio de la página web de la Secretaría de Economía, se dan a conocer datos del Inegi que confirman el crecimiento en el aporte del sector minero en el PIB Nacional y en el PIB Industrial. Foto: especial
Estos aspectos, sociales y ambientales, forman parte de la incorporación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la ONU en las actividades que realizan las em-presas mineras que forman parte de la Camimex.
Un ejemplo que muestra la manera en que las empresas mineras se encuentran implementando los Objetivos de la Agenda 2030 en sus planes de negocios, lo podemos visualizar en el Proyecto Esperanza de la empresa Esperanza Silver de México.
Esta empresa que busca transformar en riqueza social un yacimiento de oro y plata ubicado en la comunidad de San Agustín Tetlama en el municipio de Temixco, Morelos, se encuentra trabajando acorde a un Nuevo Modelo de Minería Social y Ambientalmente Responsable, el cual se encuentra alineado en su diseño y en los aspectos del relacionamiento comunitario a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de la ONU, articulando los aspectos productivos, sociales y ambientales en beneficio de la comunidad.
En la actualidad, este proyecto minero, en congruencia con una minería para el desarrollo sostenible, y en pleno respeto a la legislación ambiental, se encuentra elaborando los estudios científicos y técnicos para integrar la Manifestación de Impacto Ambiental que en su momento presentará ante las autoridades competentes.
De llegar a buen puerto este proyecto, el estado de Morelos se encontraría ante la oportunidad de incursionar en una actividad productiva con capacidad de contribuir en la reactivación económica local. Mostrando que es viable conjugar el crecimiento económico y el desarrollo social.