Abandonado por sus padres en la casa de su abuela materna de escasos recursos, Juan Luis Laguna Rosales, conocido como El Pirata de Culiacán, a los 15 años de edad saltó a la fama en redes sociales al ser grabado ingiriendo una botella de vodka y caer al suelo fulminado.
Con sólo la secundaria acabada, antes de cumplir los 14 años abandonó la casa de su abuela materna y se trasladó a Culiacán en busca de algún empleo. Su primer trabajo fue como lavador de autos, en un centro comercial.
A través de videos caseros subidos a YouTube, exhibía sus excentricidades en borracheras con amigos y en poco tiempo se convirtió en un personaje popular.