Nos cuentan que en Tamaulipas, los de Morena están haciendo un Club de Toby para elegir al candidato a la gubernatura del estado, y quien los encabeza es el líder nacional del partido, Mario Delgado, que primero le dio vuelo a la expanista y exalcaldesa de Reynosa, Maki Ortiz, al recibirla con bombo y platillo en diversos eventos, pero ahora se olvidó de ella y se ha dejado ver muy de cerca con Américo Villarreal, aspirante a la candidatura, así como con el exsuperdelegado Ramón Gómez, el legislador local Armando Zertuche y el diputado federal Erasmo González, lo que ha levantado más de una ceja en los corrillos guindas, donde se apuesta a que entre ellos se encuentra el ganón. ¡Qué tal!

Víctor Castro, un góber nuevo entre ciclones

Con apenas un mes en el cargo, nos cuentan desde Baja California Sur que el gobernador Víctor Castro Cosío (Morena) ya enfrenta su segunda emergencia por un ciclón, pues el primero ocurrió justo el día de su toma de protesta, y ahora Pamela los puso en jaque. El problema, nos dicen, es que la reunión del Consejo Estatal de Protección Civil evidenció la falta de experiencia de sus funcionarios para atender una emergencia, pues tropezaron en la conducción de la reunión, no asistieron titulares de secretarías, faltó Capitanía de Puerto, y pese al pronóstico de lluvias copiosas, decidieron aplazar la apertura de albergues y suspensión de clases. Incluso, nos detallan, falló el sonido y la conexión a internet en la reunión transmitida en vivo. ¿Será que las autoridades se están confiando de más o no terminan de aterrizar en el cargo?

Una mala herencia

De todo, pero literalmente de todo, nos afirman, se ha encontrado el alcalde de la capital de San Luis Potosí, el aliancista Enrique Galindo, en el ayuntamiento que le heredó el exalcalde Xavier Nava (Morena). Por un lado, nos relatan, está la desaparición de un equipo de cómputo en el llamado Centro Unión, en el que se tenía información importante para la administración, pero a ello se suman diversas irregularidades en otros departamentos, como la basificación irregular de cientos de trabajadores, que don Xavier intentó otorgar en contubernio con la Oficialía Mayor y la exsíndica Alicia Vázquez, quien hasta fue selectiva para decir quiénes sí y no tendrían ese privilegio. ¡Y eso que apenas llegó!

Discordia electoral

El amor acaba, nos dicen, y para ejemplo el alcalde reelecto de Mazatlán, Sinaloa, Luis Guillermo Benítez, y la dirigencia del Partido Sinaloense (PAS), quienes en campaña pregonaban amor, pero ahora, tras las elecciones, están de pleito ya que el partido local se siente traicionado y relegado en la configuración del gabinete de don Luis. Pero eso no es todo, nos añaden, pues la gota que derramó el vaso fue el hecho de que el edil no permitió que los regidores electos, tanto de Morena como del PAS, tomen parte en el proceso de entrega recepción de la administración municipal, lo que interpretaron como que algo se esconde y de plano llevaron el tema al Tribunal Estatal Electoral. El tiro está echado.