Mérida.— El campo de Yucatán fue la actividad más afectada con las lluvias y vientos de la tormenta tropical Gamma y el huracán Delta, aseguró el titular de la Secretaría de Desarrollo Rural estatal (Seder), Jorge Díaz Loeza.
El funcionario realizó ayer un recorrido en la zona oriente del estado para constatar los daños, donde visitó diversas unidades productivas que resultaron inundadas y fue informado sobre las pérdidas de animales ovinos y bovinos, así como de la producción de maíz, papaya y hortalizas; además de las afectaciones en la apicultura y en vastas extensiones de pastizales.
Díaz Loeza señaló que, por el momento, hay muchos caminos inundados y con árboles que impiden físicamente el paso del personal, por lo que aún no se puede determinar la totalidad de la superficie que fue afectada por los fenómenos meteorológicos.
Dada la situación, Díaz Loeza aseguró que se mantendrá una coordinación con las autoridades municipales para recibir los reportes, analizar los daños y brindar la ayuda necesaria.
“Estamos recibiendo información de ayuntamientos afectados como Espita, Sucilá, Panabá, Valladolid, Chemax y Tizimín, entre otros municipios —donde los fenómenos de Gamma y Delta dejaron severas afectaciones—, a fin de evaluar la situación y trabajar sobre las acciones a emprender para apoyar a los productores”, detalló.
El funcionario destacó que, en este tipo de casos, la unión de esfuerzos es básica para ayudar al mayor números de personas, tal como ocurrió hace unos meses con el paso de las tormentas Amanda y Cristóbal, cuando se activaron diversos programas de apoyo, como la resiembra de maíz y soya; recursos económicos para la apicultura y créditos agropecuarios, entre otros.
Díaz Loeza explicó que la Seder recibió la instrucción del gobernador Mauricio Vila Dosal de desplazar las dos máquinas perforadoras de pozos para ayudar a bajar el nivel de agua de las zonas inundadas de Tizimín.
Continúa inundación en la capital
A tres días del paso de Delta, varios fraccionamientos y viviendas de cinco comisarías y del sur de Mérida siguen inundadas.
De acuerdo con el ayuntamiento de la capital del estado, esto tiene relación con el rebose de los mantos freáticos en la ciudad, debido a la gran cantidad de agua que ha caído en las últimas semanas por las tormentas tropicales Cristóbal, Amanda, Gamma y finalmente el huracán Delta.
El director de Desarrollo Social municipal, José Luis Martínez Semerena, informó que en cinco comisarías de la ciudad, unas 100 viviendas resultaron afectadas con el meteoro. “La gente no tiene ni dónde dormir, porque el agua les llega a la cintura”, aseguró.
El funcionario afirmó que ante la desaparición del Fonden, ignoran bajo qué mecanismos el gobierno federal pensará ayudar o colaborar con las autoridades estatales y municipales para apoyar a los damnificados.
“Se han movilizado pipas para desazolve del agua, pero esa labor durará entre cuatro y siete días más”, puntualizó Martínez Semerena.