Veracruz
.- Los gobiernos de Javier Duarte de Ochoa (PRI) y Miguel Ángel Yunes Linares (PAN) heredaron una deuda de cuatro mil millones de pesos por concepto de laudos (resolución dictada en materia laboral) al mandato de Cuitláhuac García Jiménez (Morena).
El subsecretario de planeación de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) , José Manuel Pozos del Ángel, reveló que la administración actual que preside el morenista deberá enfrentar los juicios perdidos.
"Con algunos análisis se habla de unos cuatro mil millones de pesos y pudiera ser un poco menos o un poco más, es un monto demasiado grande. Son deudas que no se hicieron ahorita", aclaró Pozos del Ángel.
El funcionario estatal alertó que la cifra podría ser mayor porque cada día que pasa sin pagarse el adeudo aumenta.
"Es un tema fuerte que hay de laudos y es difícil de cuantificar porque cada día que pasa va creciendo el monto y es un tema como tantos otros (que dejaron)".
Desde el 2018, diversos abogados denunciaron que el entonces gobernador Miguel Ángel Yunes Linares se negaba a acatar sentencias del Tribunal de Conciliación y Arbitraje del estado e incluso de juzgados de distrito para reinstalar e indemnizar a cientos de trabajadores despedidos injustificadamente del Poder Ejecutivo Estatal.
En al menos 60 juicios de empleados despedidos en la administración de Duarte de Ochoa y del primer año del gobierno de Yunes Linares lograron que se les dictara una resolución definitiva a su favor, donde se ordena: su reinstalación, pago de salarios caídos y prestaciones, pero la administración yunista se negó a acatarlos.
iarp