Cancún.- Ante la incapacidad del ministerio público federal para acreditar el delito de plagio, imputado al exalcalde de Cancún , Gregorio "Greg" Sánchez Martínez , por la presunta reproducción, casi total, del libro “El Beso de Judas” , escrito por su excolaborador, Luciano Núñez , el juez de Distrito Alejandro Ávila Gutiérrez , dictó anoche el auto de no vinculación a proceso, a favor del exedil.
La audiencia de imputación inició a las 18:43 de este martes, en la Sala 1 del Centro de Justicia Penal Federal , radicado en Cancún y culminó a las 22:15 horas, lapso en que la Fiscalía General de la República (FGR), representada por el Ministerio Público, Juan Martínez Cruz, expuso los hechos ante el juzgador, solicitándole vincular a proceso al político, quien contenderá en el actual proceso electoral como candidato a diputado por el Partido de la Revolución Democrática ( PRD ).
Como antecedente, el Ministerio Público expuso que Luciano Núñez es autor de un libro titulado “El Beso de Judas”, que inscribió ante el Instituto Nacional de Derechos de Autor ( Indautor ), el nueve de abril de 2013 y, cuatro años después, se enteró de que “Greg” había publicado el mismo material, como una autobiografía titulada “Injusticia Protegida”.
Este segundo libro fue registrado en octubre de 2016 por Sánchez Martínez, como autor y titular de los derechos de una obra primigenia. El 20 de junio de 2017, el también cantante y empresario firmó un contrato de edición con Comunicación e Información S.A. de C.V. Ediciones Proceso , para la publicación, distribución y venta del libro, lo que dio pie a la demanda interpuesta por Nuñez por delitos en materia de Derechos de Autor , sancionados por el Código Penal Federal .
El Ministerio Público enlistó las pruebas en contra de “Greg”, siendo la primera, la existencia de “El Beso de Judas”, registrada previo a “Injusticia Protegida”; y un dictamen de una perito, quien establece que el 90 por ciento de la obra de Nuñez fue reproducida en la de Sánchez Martínez.
Martínez Cruz afirmó que el segundo registro se hizo con “dolo y ánimo de lucro” y que tanto el registro, como la reproducción, publicación, venta y distribución del material, no contaban con el consentimiento de Núñez.
El peritaje establece que los capítulos del 1 al 4; del 7 al 9; 13 y 14; del 16 al 19; del 21 al 24; y del 27 al 30; 32, 35 al 40; el 42, 44 y 48 se reprodujeron de forma idéntica del original, al libro cuestionado.
“Inclusive refiere que los textos fueron copiados de igual manera, hasta con errores ortográficos. El orden de los capítulos no es el mismo, pero sí el contenido textual y la secuencia de los párrafos
. Se observan textos idénticos y mismos diálogos”, dijo, al citar la cuarta conclusión del peritaje.
También se mencionó como prueba, una entrevista hecha por una perito oficial, al periodista, en donde él señala que “Greg” le solicitó el material que llevaba escrito del libro, para revisarlo, el cual entregó a través de su entonces pareja, a la hija del político; un disco compacto que Luciano Núñez presentó como evidencia -el 14 de junio de 2018- y que contenía el archivo de su obra “El Beso de Judas”, además del folio del registro de ésta, ante el Indautor y un dictamen de Propiedad Intelectual del 19 de marzo de 2018.
Asimismo, un dictamen en materia de audio y video, emitido por un perito técnico sobre el audio de una de las entrevistas que “Greg” concedió al periodista, para efecto del libro que describía pasajes de la vida del exedil cuando estuvo preso, las cuentas bancarias que le fueron congeladas, la persecución a su esposa Niurka Sáliva, cómo sus amigos y socios -entre ellos el hotelero, José Chapur, lo ayudaron; las deudas que contrajo, su religión, entre otras cosas.
A las 20:06 horas, Gregorio Sánchez hizo uso de la voz para responder a las preguntas que le formuló su abogada, Alin Escárcega y fue reprendido en diferentes momentos, por no dirigirse ante el juez y por usar calificativos denostativos.
Narró que Luciano Núñez no sólo era su colaborador, sino su amigo y gente de confianza; que la idea de escribir un libro surgió cuando estuvo en la cárcel -de mayo de 2010, a julio de 2011- acusado de nexos con el crimen organizado, delitos con base en testigos protegidos, que la entonces PGR no le pudo probar.
El material de la autobiografía, “no de una novela” -insistió- lo entregó a otra de sus más cercanas colaboradoras -Claudia Enríquez- para coordinar la edición. En el proyecto se incluyó a Gerardo Garay y Luciano Núñez para redacción, ortografía, y corrección de estilo, en 2012. Los créditos de ambos obran en el libro como colaboradores.
“Yo nunca supe de un libro anterior. Jamás pensé que alguien quisiera lucrar con mi autobiografía y los datos sensibles de mi familia”, manifestó, al señalar que él registró su obra en 2016, de forma “inocente”, sin saber que el periodista, presuntamente, se le había anticipado en 2013, sin su consentimiento.
La abogada Alin Escárcega citó dictámenes que el Ministerio Público omitió mencionar y acusó que en la obra del periodista, éste usó datos personales y sensibles del también excandidato a gobernador en 2010, de su esposa y de su hijo menor de edad, sin su autorización expresa , por lo cual afirmó que el libro “El Beso de Judas” constituía una prueba ilícita, que además violentaba el marco legal.
El juez consideró que esta última imputación no era materia del juicio y concluyó, luego de escuchar a ambas partes, que no le era posible determinar si el contenido de “El Beso de Judas”, registrado ante el Indautor, era el mismo que fue grabado en un disco compacto por Luciano Núñez y entregado como prueba.
Incluso, subrayó que el Ministerio Público omitió presentar datos de prueba suficientes, entre ellos, un peritaje en informática que probase que el archivo contenido en ese disco compacto “no fue alterado”.
“No tengo la certeza en ese punto (…) No me resultan suficientes los datos de prueba”, insistió.
Citó que el propio Ministerio Público presentó, el 15 de marzo pasado, una solicitud hecha al Indautor sobre el contenido de la obra “El Beso de Judas” y la respuesta negativa de su director, quien manifestó que no contaba con el archivo ni con el documento porque no se trataba de una obra publicada.
El juez insistió en que al no poder hacer el comparativo, para constatar que el contenido registrado por Núñez, era el mismo que se presentó en el disco compacto, no tenía certeza de que no hubiera alteración o manipulación del archivo y así determinar si Sánchez Martínez incurrió en el delito imputado.
Ávila Gutiérrez explicó que, aún cuando se tratara del mismo contenido -el registrado ante el Indautor y el archivo entregado como prueba por Luciano Núñez- probablemente tampoco podía acreditarse como un delito penal, sino como una falta administrativa, pues el Ministerio Público tampoco pudo probar el dolo.
“No presentaron datos suficientes para confirmar que el 90% del contenido de 'El Beso de Judas', se reprodujo en el libro 'Injusticia Protegida'”, expresó, para dar por concluida la audiencia.
El caso, no obstante, sigue abierto.
jabf