Parangaricutiro.— A pesar de que el presidente municipal de Nuevo San Juan Parangaricutiro se opone al despliegue de seguridad de las fuerzas estatales y federales, los habitantes se dicen más tranquilos con la Base de Operaciones Interinstitucional (BOI), la cual, aseguran, “no se irá”.
El pasado miércoles, personal de la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán, del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional (GN) tomó el control de la seguridad en esta localidad, a 128 kilómetros de la capital, Morelia.
EL UNIVERSAL recorrió la cabecera de este municipio, ubicado en la zona aguacatera, donde permanecen las fuerzas estatales y federales.
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Aquí, algunos pobladores afirman que el despliegue les permitió retomar sus actividades y reabrir sus negocios, tras más de dos años de asedio criminal.
Vuelven las actividades
“Queremos volver a vivir y vivir bien”, dijo un poblador, adulto mayor, apoyado en su bastón.
Por las calles se observan los patrullajes de vigilancia; tras su paso, algunas personas —taxistas e inclusive policías municipales— reportan cada paso de las fuerzas estatales y federales. Pasan por un costado y de inmediato hacen llamadas. En los accesos, los controles están a cargo de policías estatales, militares y GN; ya no están los civiles armados que se decían comuneros.
Esos hombres, con fusiles de asalto, hasta hace una semana eran apoyados por gente que se movilizaba en camionetas con las siglas del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Ahora, los locales comerciales abiertos cada vez son más, al igual que los puestos informales de comida, que también retomaron actividades.
Alcalde rechaza operativo
El despliegue de más 2 mil elementos de seguridad y la instalación de la BOI fue bien recibido por muchos habitantes; sin embargo, disgustó al alcalde Jesús Espinosa Rochín.
Pobladores señalan que Espinosa Rochín llegó al cargo respaldado por la organización criminal que operaba en la zona.
En días pasados, el alcalde difundió un video en el que expresó su rechazo al operativo; acusó que la presencia de fuerzas estatales y federales era un atropello para la población.
Pidió “un cese a la agresión que se está viviendo ahorita en San Juan Nuevo” y reprochó que la base de operaciones se instaló sin que él la pidiera.
“El día de hoy tenemos a la Guardia Nacional y al Ejército Mexicano golpeando, arrastrando y oprimiendo a toda nuestra población”, afirmó, sin presentar pruebas o denuncias.
Como respuesta, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán, José Alfredo Ortega Reyes, expresó: “Yo le diría al presidente municipal, con todo el respeto, que estamos aquí en el municipio para generarle más confianza; para auxiliarle en su capacidad de gobernar”.
A pregunta expresa, el funcionario dijo que el edil de San Juan Nuevo solicitó seguridad personal (escoltas), la cual le proporcionarán. Sostuvo que los operativos permanecerán en el municipio, con respeto a la autoridad local y a los derechos humanos, como responsabilidad del estado, para recobrar la tranquilidad.
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Generar confianza
En el acceso a la Base de Operaciones Interinstitucionales, Ortega Reyes explicó que su misión es generar confianza entre la ciudadanía y mantener la paz, y aseguró que no bajarán la guardia.
“La situación en Nuevo San Juan Parangaricutiro es de tranquilidad y de confianza. La gente está ya retomando claramente sus actividades para que regrese el turismo”, expuso.
Destacó la importancia de afianzar la instalación de la Base de Operaciones Interinstitucionales “para generar más confianza de la ciudadanía y preservar el orden público”.
Ortega Reyes resaltó la respuesta de la población, que —aseguró— ha aceptado la presencia de las fuerzas estatales y federales de seguridad.
Recordó que, hace unos días, una familia le llevó un canasto de pan al personal, dijo que ese tipo de gestos han sido constantes.
“Están muy contentos porque les hemos dado tranquilidad, paz y —sobre todo— confianza para que puedan retomar sus actividades” cotidianas, reiteró.
José Alfredo Ortega consideró que el despliegue de seguridad no ahuyenta a los visitantes, por el contrario, da certeza al turismo.
Con relación al operativo en este municipio, precisó que los patrullajes de elementos a su mando, así como de fuerzas federales, resguardan también las oficinas del ayuntamiento.
“Y hacemos algunos patrullajes de proximidad social, lo que nos ha permitido el acercamiento y que la población nos tenga mucha confianza”, recalcó.
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